Madrid, más viva que nunca

Grande, moderna y libre

Por distintos motivos suelen pasar por Madrid el fin de las vacaciones; unos por que vuelven o van, porque aterrizan o hacen tiempo para partir a sus destinos. El caso es que la ciudad no deja indiferente, hoy menos que nunca: divertida, original y en cambio continuo. Te atrapa.

Tanto si estás de paso -por negocio o placer- como si vives aquí hay lugares imprescindibles que siempre recorer, empezando en la Puerta del Sol, punto de encuentro universal; pasear por Gran Vía, sentirte pequeño y muy grande a la vez, envuelto por eternos edificios, ver la gente pasar y poder comprar algún recuerdo en cada metro cuadrado, llegar a Plaza de España hasta dar con el Templo de Debod. Soñar despiertos, pasar un ratito contigo mismo o en compañía, lograr el silencio entre claxon y ruido. y por la noche, piérdete por la zona de Los Austrias, entre el Palacio Real y La Almudena, para luego dirigirte a picotear a La Latina.

Disfrutar del sabor único que te da la ciudad, tener la sensación de que cada cosa que haces, por mucho que lo repitas, siempre es por primera vez. En definitiva, Madrid ilusiona.

Bella como ninguna

El espíritu libre de la famosa Movida Madrileña de los pasados años 80 ha vuelto al barrio más roquero del centro, Malasaña. Alrededor de la plaza del Dos de Mayo vas a encontrar las tendencias más nuevas del siglo XXI. Por ejemplo, Tipos Infames ,La Bicileta, El Gorila, Polo 'lolo', entre un sin fín de sitios imprescindibles.

La trasera de la Gran Vía, es una de las zonas de la ciudad que más están cambiando dónde convive en armonía buenos restaurantes, tiendas originales de ropa y complementos.

Al igual que Fuencarral o el Mercado de San Antón, el viejo mercado del barrio de Chueca, dónde puedes hacer la compra en uno de los puestos de la primera planta o pedir que te lo preparen en La Cocina de San Antón, el restaurante de la azotea y llevarlos a casa. No dejan de salir sitios nuevos, muy recomendable Bosco de Lobos o para desayunar un imprescindible es El Huerto de Lucas.

Ciudad de detalles

Decantarnos por una tienda para que puedas llevarte el mejor recuerdo es casi imposible, pero si dejarte alguna recomendación con la que acertarás de pleno, por ejemplo, Nuez, se encuentra en una de las callejuelas del Barrio de Salamanca y es un sitio que enamora, mensajes positivos en las paredes y una atención que incita a pecar y a llevarte todo lo que encuentres a tu paso: pulseras, colgantes, gafas de sol, ropa... todo a la última y siempre personalizado en lo cotidiano que aviva el alma.