Siete paisajes de España que de verdad son de cine
Localizaciones donde se han rodado películas -españolas y de Hollywood- que forman parte de nuestra vida
Desde grandes superproducciones internacionales hasta películas españolas de culto -y un buen puñado de series de televisión de todo pelaje- han sido rodadas por toda la geografía de nuestro país. Muchos de esos escenarios son perfectamente reconocibles, se pueden visitar e incluso se han creado rutas turísiticas en torno a ellos.
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Madrid, Almodóvar y más
En Madrid se ha rodado mucho, pero desde los 80 la capital es almodovariana (aunque comparte a Pedro con La Mancha, donde también se han creado recorridos por sus escenarios) y existe una ruta: los bloques de la M-30 donde vivían los protagonistas de «¿Qué he hecho yo para merecer esto?», el cuartel del Conde Duque en el que un operario regaba a una acalorada Carmen Maura en «La ley del deseo»... De postre, un paseo por una Gran Vía mucho más concurrida que en «Abre los ojos», mirando hacia el Edificio Capitol del que colgaban los personajes de «El día de la bestia» (si se siente muy satánico, coja el metro hasta Plaza de Castilla).
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Sevilla de las galaxias
La capital andaluza también ha acogido muchos rodajes («Ocho apellidos vascos», «Juego de tronos», «Nadie conoce a nadie»...). Pero la Plaza de España es quizá el gran escenario sevillano. Fue Naboo en «El ataque de los clones» -segunda de las precuelas de «Star Wars»- y también apareció en «Lawrence de Arabia» y en «El dictador», de Borat, entre otras.
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Almería, Indy y los vaqueros
El desierto de Tabernas fue la meca del «spaghetti western». Allí se rodaron más de 300 películas entre los años 60 y los 80 (y algún homenaje como «800 balas») y se conserva un poblado del oeste. Aún más conocido es otro héroe con sombrero que anduvo por los alrededores: buena parte de «Indiana Jones y la última cruzada» se rodó en Almería.
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Clint en Burgos
Pero no sólo por Andalucía anduvieron Sergio Leone y Clint Eastwood. El cementerio de Sad Hill , donde tenía lugar el clímax de «El bueno, el feo y el malo», está en Burgos, muy cerca de Santo Domingo de Silos, y ha sido reconstruido gracias a una campaña de «crowdfunding».
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Albacete, que no es poco
Auténtica devoción es lo que se tiene por José Luis Cuerda en los pueblos albaceteños de Ayna, Liétor y Molinicos. Allí rodo «Amanece, que no es poco» y ahora existe una ruta amanecista para que los seguidores de la comedia de culto por antonomasia del cine español vayan a hacer estampas y a hablar con las calabazas.
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Huérfanos con abuelo en Llanes
La ruta «Llanes de Cine» que organiza el ayuntamiento del municipio asturiano le debe mucho a Gonzálo Suárez y a José Luis Garci, dos directores muy ligados al Principado. «Mi nombre es sombra», «El portero», «Remando al viento», «You’re the one» y «El abuelo» son algunas de las películas que rodaron en Llanes, que también fue escenario (palacio de Partarríu) de la muy exitosa «El orfanato».
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Fantasmas en Cantabria
La gran casona que habitaba Nicole Kidman en «Los otros» no estaba en la Isla de Jersey, sino en Cantabria. Es el Palacio de los Hornillos, en Las Fraguas, y ha acogido otros rodajes. No se puede visitar el interior, pero merece la pena acercarse a ver el exterior de este antiguo lugar de veraneo de Alfonso XIII.