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Ruta por el entorno de Riotinto: huertos y minas

Descubre el misterio histórico y cultural que esconde esta zona de la provincia onubense

Turismo en Riotinto ABC

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La tradición minera en el entorno de Riotinto, en Huelva, se remonta miles de años atrás. Desde la llegada de los íberos a la región, multitud de culturas han aprovechado la riqueza del suelo para realizar extracciones de cobre, hierro, manganeso y otros minerales de interés. El paisaje del medio natural es inigualable, la explotación de los yacimientos mineros a lo largo de los tiempos ha alterado el entorno, destacando, como no podía ser de otra manera, el Río Tinto, con esa coloración rojiza tan característica. Es esta singularidad del paisaje de las Minas de Riotinto junto con El Campillo la que hizo que fuese declarado Bien de Interés Cultural como Sitio Histórico por la Junta de Andalucía.

A pesar de que la fama de este enclave se deba precisamente a lo relacionado con las minas, actualmente se está trabajando para rescatar otras tradiciones del lugar. De hecho, la cultura popular de esta zona concentraba a los lugareños sobre todo alrededor de huertos familiares . Las distintas actividades agrícolas, ganaderas, forestales etc. han sido un claro reflejo de la vida de nuestros antepasados, por ello es indispensable mantener su esencia original.

En la barriada Alto de la Mesa de Riotinto se encuentra el Centro de Interpretación Etnológico Matilde Gallardo (CIE) , que nos propone un viaje en el tiempo para hacernos llegar la cultura de la que hablamos en primera persona. Este centro, convertido a su vez en asociación, tiene como uno de sus objetivos fundamentales la rehabilitación y el fomento de esos huertos, como el de Librada.

Procedente de una humilde familia cordobesa de tradición jornalera Librada comenzó a ser responsable del huerto en 1974, siendo traspasado por un paisano suyo. Actualmente el Huerto de Librada es considerado indispensable en el proceso de patrimonialización de este tipo de espacios iniciado desde el CIE. Otro de los objetivos de esta asociación es realzar la importancia histórica de esos huertos que nacieron y se desarrollaron en el entorno minero de Riotinto, por ello desde el propio centro hacen una llamada al hermanamiento de cualquier huerto que desee ofrecer sus productos, o simplemente aparecer como huerto asociado con la posibilidad de añadir fotos en su página de Facebook. De entre las actividades más destacadas que nos ofrece el centro de Interpretación nos encontramos distintos congresos, charlas y ponencias, así como visitas guiadas con degustación de platos elaborados con productos de temporada. También disponen de talleres de formación permanente.

Paisajes mineros

Las explotaciones mineras han pasado a formar parte del paisaje de la región andaluza. Aunque la mayoría están actualmente en desuso, se han convertido en auténticas joyas naturales, moldeadas por la mano del hombre, que bien merecen una escapada turística. Uno de los espacios más conocidos es el entorno del Río Tinto. Más de 5.000 años de actividad minera han convertido a la localidad de Minas de Riotinto en un escenario de tonos rojos, amarillos y ocres. Desde que las antiguas minas se cerraron, aunque recientemente se ha reactivado su explotación por parte de otra entidad, son muchos los visitantes que acuden a este rincón onubense. Y no solo turistas, también directores de cine e, incluso, la propia NASA, se han interesado por este lugar debido a sus semejanzas con el planeta Marte. La visita al parque minero tiene dos partes. Por un lado, es imprescindible recorrer el museo «Ernest Lluch», ubicado en el edificio que albergó el hospital de la empresa Río Tinto Company Limited, compañía británica que explotó las minas entre 1873 hasta 1954.

Explotación minera de la zona ABC

Actualmente, el centro de interpretación está gestionado por la Fundación Río Tinto y, además de explicar con detalle la labor de dicha entidad, alberga numerosas piezas relacionadas con la minería y la metalurgia y objetos de arqueología industrial. Destaca el vagón del Maharajá, el vagón en vía estrecha más lujoso del mundo que fue construido para la reina Victoria de Inglaterra y traído a Riotinto para una visita de Alfonso XIII. Pero, sin duda, la parte más emocionante de la visita es el paseo en ferrocarril. Antes de la llegada del consorcio británico «Riotinto Company Limited», la conexión de la comarca con el puerto onubense se hacía a través de medios tan rudimentarios como diligencias o carros de mulas. Con la llegada del ferrocarril se abrió una nueva época que permitió crecer a la explotación. Ahora, la Fundación Río Tinto ha recuperado para uso turístico 12 kilómetros de la antigua línea ferroviaria por los que es posible viajar en locomotoras a vapor y vagones restaurados del parque móvil de la antigua compañía minera. El resultado es un viaje a otra época, y casi a otro mundo, que gustará a toda la familia.

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