Pasando las noches en el Parque del Alamillo
El Parque del Alamillo en Sevilla celebra durante todo el verano actividades nocturnas para aprovechar las temperaturas de la noche
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Pasar el verano en Sevilla no es tarea fácil. Si eres un visitante en la capital hispalense durante los meses de julio y agosto ya te habrás dado cuenta, que las horas centrales del día son inhóspitas para cualquiera, y que las visitas a los monumentos y el andar por la calles debe relegarse a otras horas, y cambiarlas por un buen aire acondicionado o una buena piscina. Por eso la mayoría de las actividades se realizan por la noche, y el Parque del Alamillo es un lugar ideal para ello.
Veranillos del Alamillo 2016
El Parque del Alamillo es el parque más grande de Sevilla, apenas a unos minutos del centro y de fácil acceso incluso andando desde la Alameda. Y para este verano ha preparado todo un calendario de eventos que comienzan a partir de las diez de la noche, todos los días de julio y agosto, aprovechando el frescor de esta zona verde pegada al río donde la temperatura es mucho más agradable que en pleno centro
Las actividades son de todo tipo y dirigidas a todos los públicos, aunque el elemento central es la música, con conciertos de música pop y rock como Gatos Pardos, My Weapon, Satorys, o South Soul, entre muchos otros. Como no podía ser de otra forma en Sevilla, el flamenco también ocupa un lugar especial, con las Veladillas Flamencas de los jueves, con artistas del cante, la guitarra y el baile. Además habrá cine, talleres, y magia, entre muchas otras sorpresas.
Los domingos son días especialmente reservados para los más pequeños , por lo que si viajas con niños puede convertirse en una ocasión ideal para llevarles a hacer algo diferente. Habrá talleres especialmente preparados para ellos, películas de animación para toda la familia, gymkanas para que se desfoguen a gusto y hagan amigos, cuentacuentos o espectáculos de marionetas, entre otros.
Así que ya sabes. Si estás de visita en Sevilla durante el verano, son muchas las razones para pasar un par de noches al fresco del Parque del Alamillo, descansando las piernas después de un día de visitas bajo el implacable astro sol.