Viajar
Cinco razones para visitar Málaga este otoño
Despedido el verano, la provincia continúa siendo un destino extraordinario en esta época del año gracias a la actividad cultural de su capital y la oferta de turismo activo en el interior

Con la llegada del otoño el calor da un respiro a la provincia de Málaga y abre la puerta a un sin fin de actividades de ocio más allá de su línea de costa. El cambio de color de sus zonas verdes, la brisa fresca al caer la tarde y el olor a castañas que inunda las calles son el telón de fondo perfecto para aprovechar los ratos libres y disfrutar de paseos en familia, rutas con amigos y visitas a las innumerables exposiciones que ofrece la 'Ciudad de los Museos' .
Noticias relacionadas
En ABC te damos todas las razones que necesitas para visitar la capital de la Costa del Sol y la provincia de Málaga antes de que acabe 2021. ¿A qué estás esperando?

Su centro histórico
Aunque no tan extenso como el de otras capital, Málaga puede presumir de contar con uno de los centros históricos más peatonales de todo el país. Sus calles son perfectas para pasear en familia, ya sea de compras o por turismo. La elegante calle Larios es posiblemente el salón común de todos los malagueños y en esta época del año, como en casi todas, el ritmo es frenético.
Por una de sus bocacalles llegarás hasta la plaza del Obispo, donde inevitablemente dirigirás la vista al cielo para contemplar la monumentalidad de la Catedral de la Encarnación y su torre mocha que le ha valido el cariñoso apelativo de 'La Manquita'.
Tras recorrer la calle Císter junto a los jardines de la seo desembocarás en otra colosal edificación: el Palacio de la Aduana, actual sede del Museo de Málaga y punto de inicio de otra de las vías con más encanto de la capital, la calle Alcazabilla . Situada al otro lado de la judería, es la simbiosis perfecta entre el bullicio del mundo moderno, con la actividad frenética de sus terrazas, y la historia viva de una ciudad que se remonta al siglo VIII a.C.

Su patrimonio
La belleza de su centro histórico se debe en gran medida al patrimonio arquitectónico que atesora la ciudad y que por fortuna se ha puesto en valor con el paso de los años. A la Catedral, cuya construcción se prolongó más de 250 años, se une el Castillo de Gibralfaro, la Alcazaba o el Teatro Romano . Ver los últimos rayos de sol reflejarse en los sillares de piedra sobre la ladera coronada por las murallas árabes cautiva a cualquiera.
El centro está además salpicado de románticos edificios como el Palacio de los Condes de Buenavista ; el Palacio de Villalón; la antigua Casa de Correos y Telégrafos -hoy Rectorado de la Universidad de Málaga- o La Casona del Parque, sede del Ayuntamiento desde que finalizara su construcción en 1919.

Sus museos
Si uno decide visitar Málaga no puede dejar escapar la ocasión para conocer si no todos, al menos uno de sus museos. Hay más de treinta . El Museo Picasso abrió la puerta a la revolución cultural de Málaga y hoy en día es el más visitado, pero la oferta se extiende al Museo Carmen Thyssen, el Centre Pompidou o el Museo Ruso.
El Museo de Málaga es el más reciente. Fue inaugurado en 2016 en el Palacio de la Aduana, siendo el quinto más grande de España y el mayor de Andalucía. Acoge el Museo de Bellas Artes y el Museo Arqueológico Provincial y destaca por albergar una de las mayores colecciones de pintura del siglo XIX en España, con obras de Sorolla, Madrazo, Enrique Simonet o Bernardo Ferrándiz.
Varios museos han inaugurado recientemente exposiciones o apuran los últimos días de sus muestras temporales. El Museo Picasso Málaga acaba de abrir al público 'El París de Brassaï. Fotos de la ciudad que amó Picasso' y el Museo Carmen Thyssen ha hecho lo propio con 'Sorolla en Jávea'. También el Museo Ruso de Tabacalera mantiene hasta el 4 de abril de 2022 la exposición 'Guerra y paz en el arte ruso' e inaugura otras tres temporales el próximo viernes 29 de octubre: 'Vanguardias en el arte ruso', 'Dostoievsky en su bicentenario' y 'Maiakovski, artista y poeta'.

Su gastronomía
La ruta gastronómica en Málaga es infinita, pero una parada obligatoria son sus chiringuitos, como el Gutierrez Playa en la playa de la Misericordia, o uno de los más famosos, El Tintero , donde se ofrecen los platos a subasta.
En el centro de la capital hay opciones variadas. La bodega El Pimpi es un emblema turístico de la ciudad, con productos típicos de la tierra y decorado con barriles de vino de Málaga firmados por los artistas que han visitado el local desde su fundación en 1971.
Entre los numerosos locales de cocina internacional y cosmopolita que hay repartidos por el centro, destacan negocios tradicionales como el Café de Chinitas o la taberna Antigua Casa de Guardia , que cuenta con una variada carta de vinos malagueños.
Si lo que buscas son tapas y platos típicos de calidad y a buen precio, una opción es Casa Lola -con tres locales en el centro-. También puedes reservar el paseo por la calle Larios para la tarde y hacer una parada en Casa Mira , una de las heladería más populares de la ciudad.
Su naturaleza
Más allá de la capital, la provincia de Málaga ofrece rincones para perderse en mitad de la naturaleza como los Montes de Málaga, la Sierra de las Nieves, declarada recientemente Parque Nacional, el Torcal de Antequera, o la Serranía de Ronda . Otoño, de hecho, es la temporada perfecta para recorrer alguna de las múltiples rutas y senderos que esconden sin el calor sofocante del verano.
De un extremo a otro de la provincia podrás visitar también el Valle del Guadiaro, el Caminito del Rey , las ciudades monumentales de Antequera y Archidona, el Pantano de la Viñuela, la puente colgante de El Saltillo, la Cueva de Nerja o Frigiliana, con sus fachadas encaladas y vistas privilegiadas a la Axarquía.