Cinco razones para visitar Granada este otoño
El comienzo del curso lleva consigo en Granada una de las épocas con mayor actividad cultural y un atractivo turístico especial con respecto a otras épocas del año
Granada tiene en el otoño una fecha marcada en rojo en el calendario. Es en esta época donde las altas temperaturas propias del verano en la provincia granadina dan por fin un respiro, dejando disfrutar a quien la visita de uno de los periodos más bellos y activos a nivel cultural y turístico en el año.
Antes de que los chaquetones se pongan como obligación y el frío haga pensarse dos veces aquello de salir de casa, los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre , permiten descubrir en todo su esplendor este rincón imprescindible para todo visitante al sur de la península. Estas son algunas de las razones para ello.
Disfrutar de un paseo por el centro histórico de la capital
Si hay una estación del año, con permiso de la primavera, donde el ambiente acompaña al ritmo de la capital granadina, esa es el otoño. Pasear por sus calles, desde la misma catedral en la plaza de las Pasiegas , hasta casi salir del municipio en las orillas del río Genil , sólo por cuadrar una de las infinitas variables del paseo, se convierte en una delicia para quienes lo transitan.
El olor característico de las castañas asadas comienza a acompañar muy pronto a los viandantes, desde octubre prácticamente. Como suele ocurrir en ciudades históricas como esta, el patrimonio sucede a cada esquina y se deja ver en sus principales lugares de concurrencia.
Barrios como el del Realejo, el Albaicín o más próximos al río, como el Paseo del Violón se convierten en magníficas opciones para caminar, tapear o, si uno se anima, buscar el mirador más cercano para disfrutar de las vistas.
Conocer su patrimonio (más allá de la Alhambra)
Granada ha tenido siempre cierta problemática en verano en los últimos años con la masificación turística. No en vano, llegó a ser la cuarta ciudad más visita del país en tiempos pre-covid . La vuelta a los aforos completos ha traído la posibilidad plena del turismo cultural en la mejor época para ello. El otoño es considerado por muchos el momento más indicado para visitar la joya de la corona: la Alhambra y los jardines del Generalife.
El complejo monumental, patrimonio de la humanidad , eso sí, suele ponerlo complicado para entrar si no se ha reservado con antelación. Ello, sin embargo, encamina precisamente a quienes visitan la zona a conocer los alrededores de la fortaleza nazarí. Los bosques de la Alhambra son especialmente bellos en otoño.
Lugares como el Carmen de los Mártires , por poner un ejemplo, son una alternativa estupenda en ese sentido. Por otra parte, museos como la Casa Museo Manuel de Falla o las exposiciones en el Palacio de Carlos V sirven de añadido a la amplia oferta de la capital, donde sobresalen el Centro José Guerrero, la Catedral y la Capilla Real como irrenunciables en cualquier visita museística y patrimonial en la capital andaluza.
Comienza la temporada de conciertos (Granada Sound incluido)
Si ya es difícil elegir entre qué visitar entre el amplio patrimonio histórico granadino, la oferta cultural provoca un mareo idéntico. Sobre todo en lo que se refiere a su música. Una de las razones de peso de muchos turistas de la capital nazarí son sus conciertos.
Buena prueba de ello son salas como Plantabaja o La Tren , que siguen haciendo gala de buena salud en su programación , sobre todo ahora que la pandemia lo permite. Con todos los protocolos sanitarios conformes a la legalidad vigente, ya sea en el Palacio de Congresos o en pequeños pubs como la La Tertulia o el Ruido Rosa , la música late por los cuatro costados de la ciudad.
Por si fuera poco, el Granada Sound, el festival por excelencia en la capital, y que sirve tradicionalmente como cierre del verano, se ha tenido que retrasar en estos meses debido a la crisis del covid, por lo que no será hasta el próximo cinco de noviembre cuando tendrá lugar. Una razón más de cara a los melómanos para escoger Granada como destino preferente en estas fechas.
Adentrarse en el interior de la provincia o esquiar en Sierra Nevada
Los focos, como suele ocurrir en estos casos, suelen llevar primero a la capital. Granada no es una excepción. La mera existencia de la Alhambra bien lo merece. Pero Granada es mucho más. El otoño, de hecho, es una de las mejores épocas para descubrir, antes de que llegue el frío invernal, las múltiples rutas y senderos que se proponen entre sus pueblos.
Ya sea alrededor de su área metropolitana , donde la Vega resalta en su inmensidad de verde y los cauces de sus ríos, o en las Alpujarras, donde pueblecitos como Pampaneira y Capileira siguen siendo lugares imperdibles para quienes buscan algo más de tranquilidad. Los espacios rurales de la provincia bien merecen coger el coche y perderse durante unas horas. Para comer: Trevélez, capital del jamón en Granada.
Además, siguiendo con la estela de la montaña, el final de noviembre, concretamente el día 21, trae consigo el comienzo de la temporada en Sierra Nevada , con lo que los esquiadores, ya sin restricciones, podrán disfrutar por fin de uno de los lugares más emblemáticos de la nieve en España.
Darse un último chapuzón en la Costa Tropical
La Costa Tropical ha sufrido el azote de la pandemia en términos económicos como pocas zonas en la provincia. Las restricciones por la covid han tenido contra las cuerdas a sus hosteleros hasta el último momento, siendo el último distrito sanitario en quedarse en nivel cero este miso mes de octubre.
Sin embargo, ahora con todas las condiciones de la vieja normalidad, darse un último chapuzón en las aguas de joyas de la costa andaluza como Almuñécar o Salobreña no parece una mala idea, toda vez que el frío todavía no se ha terminado de asentar.
Con todo, el ingente número de calas y el patrimonio natural que atesora la Costa Tropical, con lugares destacados como La Rijana o La Joya, hace que incluso bien abrigado merezca la pena dar un paseo por ellas. Además, la oferta cultural en muchas de estas zonas costeras es también palpable, con la citada Almuñécar y sus museos arqueológicos y naturales como principal exponente.