Uno de los grandes cavas de España
Casa Sala, de Freixenet, se elabora de una manera tan tradicional que incluye la prensa originaria de la bodega, que data de 1900
Freixenet no necesita presentación. Quizá, sí, sus orígenes, pero a veces una frase basta: «Todo empezó en Casa Sala hace más de cien años». Empezó hace siglo y medio, en 1861, aunque la plaga de la filoxera arruinó el negocio primitivo de Francesc Sala de producción y comercialización de vinos. Hasta que en 1914, del matrimonio entre Dolores Sala, nieta del fundador, y Pedro Ferrer nació la primera botella comercializada con el nombre de Freixenet.
Casa Sala, hoy, es uno de los grandes cavas de España. Elaborado de una manera tan tradicional que incluye la prensa originaria de la bodega, que data de 1900, supone un espumoso estrictamente elegante. Así lo escribía de la anterior añada y mantiene el pulso en su añada 2006, aunque con mayor sensación frutal. Otra de las imágenes que te deja es la frescura, después de unos aromas frutales llenos de finura y donde perviven las notas cítricas y de manzana. Y los recuerdos tostados también en la nariz. Y como dice la bodega, los toques de bollería en boca. Pero todo esto, sin ser anecdótico, no dejar de ser una simple nota de cata. Y Casa Sala tiene poco de simple. Es pura artesanía, es un placer.