Diez restaurantes de Alicante a tiro de AVE

LA ERETA

El maestro Josep Pla, en su libro «Lo que hemos comido», escribía: «Los restaurantes de Valencia son en general tan discutibles que han contribuido de manera visible al mantenimiento de la vida hogareña». Desde que el escritor catalán dejara impresa esta frase hasta la actualidad no ha transcurrido demasiado tiempo, pero la transformación de los restaurantes de la Comunidad Valenciana ha sido total. Y Alicante no ha sido una excepción. En un fenómeno paralelo al experimentado por la cocina española en los últimos años, esta provincia ha registrado una auténtica revolución culinaria. Su rica oferta turística, reforzada ahora con la llegada del AVE, se completa con una gastronomía de nivel de la mano de los cocineros (y ojo, cocineras) alicantinos. La lista es amplísima porque a los ya consagrados y reconocidos internacionalmente como Quique Dacosta, que ejerce su maestría en el restaurante de Denia que lleva su nombre, con tres estrellas Michelin, aparecen otros que poco a poco van ocupando lugares de privilegio. Su principal virtud es que no se olvidan de las raíces populares, de esa cocina sencilla trasmitida de padres a hijos, ni de las extraordinarias materias primas de la huerta o del mar Mediterráneo, oscurecidas muchas veces por la importancia y la variedad de la cocina del arroz.

Aunque la provincia tiene mucho y bueno que contar, nos centramos hoy en la capital, nuevo destino del tren de alta velocidad. Tienen aquí una selección personal de diez de las mejores mesas alicantinas, entre las que incluimos también algunas barras porque no hay que olvidar que esta es una de las ciudades más atractivas para el tapeo por la variedad de su oferta y la calidad de la misma. Una tentación que ha enganchado a cocineros de primer nivel como el francés Robuchon o Ferrán Adriá, que se declaran entusiastas de estas barras, algunas de las cuales están, por méritos propios, entre las mejores de España. Estos son algunos de los sitios, por orden alfabético, donde comerán o tapearán muy bien.

LA ERETA

Situado en un precioso emplazamiento, debajo mismo del castillo de Santa Bárbara, con unas vistas únicas de la ciudad de Alicante desde sus amplios ventanales. Comedor minimalista en el que es uno de los principales restaurantes de cocina moderna, pero con raíces alicantinas, de la ciudad. El cocinero, Dani Frías, sólo ofrece dos menús, uno largo y otro corto, que se diferencian únicamente por el número de platos, siempre muy abundantes en cantidad. Cocina de buen nivel que refleja la técnica del chef. En los últimos menús aparecían, por ejemplo, un bombón de gamba roja con remolacha y gazpacho de trufa; emperador con ajo y perejil; o el arroz verde y negro de sepia. Buena carta de vinos.

Parque de la Ereta, s/n. 965 14 32 50.

GUILLERMO

Más de medio siglo lleva abierto este bar-restaurante, toda una institución en la ciudad, que se ha convertido en lugar de visita obligado para los alicantinos. Buenas conservas y tapas y raciones de cocina casera entre las que sobresale una magnífica ensaladilla rusa que justifica por sí sola la visita. Tampoco hay que perderse los guisos tradicionales alicantinos, cada día de la semana uno diferente: olleta de arroz, lentejas, habichuelas en salsa, hervido… Buenos pescados y mariscos, y algunas entradas tradicionales como el aspencat (tomate, pimiento, berenjena y cebolla asada con bacalao) o la pericana (crujiente de piel de bacalao con ajo y aceite de oliva). Siempre con una muy atractiva relación calidad-precio.

Pintor Velázquez, 21. 965 20 01 84.

LA MAJA

Rafa Melero, un cocinero con larga experiencia, formado junto a Manolo de la Osa, está al frente de este agradable restaurante, no demasiado fácil de encontrar, situado en la dársena pesquera, frente a los astilleros Doqueve, y que cuenta además con una espectacular terraza. Sus arroces, como el de gambas, calamar y setas, son de los mejores de la ciudad, complementados con unas excelentes croquetas de jamón o de leche de oveja latxa e idiazábal y otras picadas como el pulpo asado al horno o un buen surtido de mariscos. Como alternativa al arroz, un plato tradicional de Alicante, el gazpacho de mero, tanto meloso como seco.

Muelle de Poniente, s/n. Nueva dársena pesquera. 966 28 37 43

MAVI

Un pequeño y modesto bar de barrio cuya atractiva barra congrega a clientes de todo Alicante, desde políticos y deportistas hasta los propios vecinos de la zona. Su gran especialidad son los mariscos y otros productos de las costas levantinas: langostinos, gamba roja, cigalas, quisquillas, calamares fritos, sepionet a la plancha… Siempre género de calidad. Como alternativa buenas tapas tradicionales, desde ensaladilla rusa hasta patatas bravas, pasando por un amplio surtido de excelentes salazones. Cuenta con algunas mesas, pero suelen estar siempre ocupadas.

Foguerer, 9. 965 24 87 17

MONASTRELL

María José San Román fue una de las pioneras en la modernización de la cocina alicantina. Especialista en la cocina con azafrán, terreno en el que marcó una línea propia, se centra ahora de manera especial en los aceites. Recientemente trasladado al hotel Amérigo, dispone ahora de un espacio más elegante y amplio para ofrecer platos refinados y actuales, muy personales, en los que siempre están presentes los sabores de la región. Entre los últimos, guacamole de guisantes con bogavante; arroz caldoso de caldero con pescados de roca y alioli de azafrán; el salmonete en filete con verduras y anises, o la pularda con emulsión de espárragos verdes, salvia y lentejas infladas. El restaurante cuenta también con una barra para tapeo.

Hotel Amérigo. Rafael Altamira, 7. 965 14 65 75

NOU MANOLIN

Es, desde hace años, la referencia del tapeo en Alicante y una de las mejores barras de España. A lo largo del extenso mostrador se exhibe un tentador y espectacular surtido de los mejores productos del mar y de la huerta tanto alicantinos como de otras regiones. Ensaladilla, croquetas de jamón y bacalao, impresionantes gambas rojas, cigalas, quisquillas, alcachofas fritas, sepietas, calamares encebollados, salazones, chacinas, callos, manitas de cerdo… En el estrecho paso que deja la barra se agolpan cada día los clientes que buscan ese producto casi desaparecido. En el piso de arriba un amplio y luminoso comedor en el que se ofrecen platos tradicionales: verduras, guisos, buenos pescados… y por supuesto arroces secos y caldosos.

Villegas, 3. 965 20 03 68

PIRIPI

Hermano gemelo de Nou Manolín, su barra tiene poco que envidiar a la de este. Mariscos de mucha calidad (gamba roja, cigala, quisquilla) junto a raciones de calamar, de ensaladilla rusa, de verduras a la plancha o de ibéricos de Joselito. Notables también su bonito en escabeche, las anchoas de bota en aceite de Baena, el amplio surtido de montaditos y algunos guisos tradicionales que se sirven en medias raciones, como las albóndigas o las manitas. En la planta superior está el comedor, recientemente remodelado, para una comida más formal en la que no debe faltar algún arroz o cualquiera de los pescados del día procedentes de las lonjas de Santa Pola y Denia.

Óscar Esplá, 30. 965 22 79 40

EL PORTAL

Con aires de taberna moderna, y una cocina de mercado puesta al día, cuenta también con una sugerente barra. Un sitio para comer bien de manera desenfadada. En su carta nunca faltan buenos mariscos de la lonja (cigalas de playa, quisquillas de Santa Pola, espardeñas, gamba roja de Denia o calamar de potera), salazones de Vicente Leal y platos en plan de tapas como el sangacho de atún sobre coca de verduras, las alas de pato con all i pebre o la coca de tomate seco. Buen apartado de arroces actuales, entre ellos el de tripas de bacalao con embutido de Pinoso o el meloso de sepionet y boletus. Para rematar, el helado de turrón de Jijona.

Bilbao, 2. 965 14 32 69

LA TABERNA DEL GOURMET

En muy poco tiempo, la familia Perramón ha hecho de esta taberna una de las referencias de Alicante. Una amplia barra y algunas mesas en un nivel superior donde disfrutar de los mejores mariscos (gamba roja, quisquillas, cigalas, espardeñas…), de los excelentes salazones alicantinos, y de raciones tradicionales como la ensaladilla, la merluza rebozada, los calamarcitos a la plancha, las alcachofas fritas, las setas o un jamón bien cortado. No hay que perderse tampoco sus arroces. Además, muy buena selección de vinos, bastantes de ellos por copas.

San Fernando, 10. 965 20 42 33

TK

Para comer bien a un precio mejor. Este es el restaurante abierto por una joven pareja argelina: Tarek Bensenoussi (que es quien cocina) y Nafissa Kehal (que atiende la sala). Él se formó en La Ereta. Cocina contemporánea que se plasma en unos menús de precio imbatible, tanto en días laborables (por 15 y 18 euros) como en fin de semana (por 20 y 28 euros). El origen de los propietarios se plasma en un excelente cuscús de cordero y verduras que se ofrece viernes y sábados. El resto son platos modernos y sensatos elaborados con los productos de la despensa alicantina. Destacan los arroces con pescado del día.

Tucumán, 6. 966 30 00 75