Viendo Sevilla en Kayak desde el Guadalquivir

Sevilla es una ciudad preciosa con una enorme cantidad de lugares que ver y rincones que explorar. Y uno de ellos suele pasar desapercibido a muchos, a pesar de que está ahí siempre, esa arteria que cruza la capital hispalense y que responde al nombre de Guadalquivir. Por eso, aunque muchos no hayan caído en ello, supone una experiencia inolvidable poder hacer turismo a ras de agua, haciendo al mismo tiempo un poco de deporte, a bordo de un kayak.

Sevilla ha sido desde hace tiempo un lugar donde el deporte del remo ha tenido una gran importancia, hasta el punto de albergar el Centro de Alto Rendimiento para deportistas de esta modalidad. Es por eso que con el tiempo han proliferado las empresas que han pretendido dinamizar este deporte, convirtiéndolo en algo al alcance de todo el mundo. Y, cómo no, al ser una ciudad turística, se crearon actividades para que los visitantes pudieran ver la ciudad desde otro punto de vista. De esta forma, navegando con tranquilidad, a ras de agua, se pueden ver monumentos, calles y parques de una forma muy diferente.

Lo cierto es que subirse a un kayak está al alcance de cualquiera, a pesar de ser una actividad física cada uno pone su propio nivel, y desde los más mayores hasta los más niños pueden coger los remos y avanzar a su propio ritmo. Es importante en este sentido elegir bien el tour que uno quiere hacer, conociendo previamente la duración del mismo y la dificultad, aunque en estas aguas mansas la dificultad es básica. Existen varias empresas que se dedican a organizar tours en grupo en kayak, e incluso para ocasiones especiales, como cumpleaños o despedidas de soltero, así que consulta las distintas opciones y mira cuál es la que más te interesa.

Eso sí, vamos a dar un consejo. A pesar de estar en el agua, no se puede considerar una actividad refrescante, y si uno viene en los meses de verano, mejor que opte por la primera hora de la mañana o esperar a la tarde para huir de los calores más sofocantes del día. Esta opción puede ser preciosa, disfrutando de Sevilla desde el agua con la puesta de sol y ver cómo se van despertando las luces de la ciudad.