CHINA
Una desconocida estación de esquí junto a la Gran Muralla
En Zhangjiakou, a 180 km. de Pekín, se celebrarán los JJOO de Invierno 2022
El esquí era un perfecto desconocido en China hasta hace poco tiempo. En 1996 había menos de 10.000 esquiadores y nueve pequeñas estaciones de esquí. Hoy se calcula que son 20 millones las personas que practican el deporte blanco y hay más de 70 estaciones. Tres de ellas están en Zhangjiakou , una ciudad situada a 180 km. de Pekín, donde se celebrarán las competiciones al aire libre de los Juegos Olímpicos de Invierno 2022, mientras que en la capital china tendrán lugar las competiciones bajo techo.
Zhangjiakou tiene una población de unos 4,5 millones de personas , lo que para China (1.370 millones de habitantes) quiere decir que es una ciudad «relativamente pequeña». Durante siglos se la conoció en Occidente como Kalgan y aquí tuvo lugar en 1946 una cruenta batalla de la guerra civil entre nacionalistas y comunistas. Pero hoy los folletos turísticos prefieren recordar que era una importante encrucijada en la ruta de las caravanas que iban hacia Mongolia y a la que llamaban «La Puerta de Pekín».
Su candidatura estuvo envuelta en una controversia ya que decían sus detractores que carecía de nieve suficiente para celebrar los juegos. Nosotros estuvimos a principios de noviembre y la verdad es que había nieve de sobra. Nos aseguraron que el periodo nevado suele durar unos 150 días dese noviembre a marzo en altitudes que van de los 2.174 a los 1.500 metros.
El gobierno chino se ha volcado y siete años antes ya están a pleno funcionamiento la mayoría de las infraestructuras. En breve se prevé inaugurar una línea de tren de alta velocidad (hasta 350 km./hora) que realizará el trayecto Pekín-Zhangjiakou en menos de 50 minutos.
Las estaciones de nieve se encuentran muy cerca de numerosos atractivos turísticos que tienen un especial encanto en invierno. Chengde, por ejemplo, que se encuentra también en la provincia de Hebei. Hace más de docientos años, en la dinastía Ming, el emperador Kangxi (1654-1722), el que autorizó la práctica del cristianismo en China, construyó aquí el conjunto palaciego más grande del país (el doble que el Palacio de Verano de Pekín), «para escapar del calor» del verano capitalino. Pabellones y jardines al estilo de los del sur de China que en 1994 fueron declarados Patrimonio Cultural por la Unesco.
Junto a ellos están los llamados Ocho Templos Exteriores , de los cuales hay cinco abiertos al público. El de Puning es una construcción típicamente china a base de patios cerrados que dan paso a otros. Una gran pagoda de cinco pisos, alberga una estatua gigante de Buda (Bodisatva) de madera de casi 23 metros de altura y 110 toneladas de peso. Una maravilla.
Muy cerca, en la montaña en la que el emperador Qianlong (1711-1799) organizaba excursiones de caza, se encuentra el monasterio Putuo Zongcheng, que imita al famosísimo Potala del Tíbet. No es lo mismo, pero sirve para hacerse una idea.
La Gran Muralla
En chino se llama Chang Cheng, literalmente «Larga Fortaleza», pero en el mundo se conoce como la «Gran Muralla». Tiene más de 20.000 km. desde el Mar Amarillo, muy cerca de la frontera con Corea, hasta el desierto del Gobi.
A poca distancia de las pistas de Zhangjiakou está el tramo conocido como Jinshanling (Cresta de la Montaña Dorada), menos conocido que otros más próximos a Pekín.