Diez barras de tapas de Madrid donde acertar seguro
El crítico de ABC elige diez direcciones imprescindibles para comer de tapas y raciones en la capital
Comer de tapas es una tradición en muchas ciudades y pueblos de España. Una costumbre que implica amigos, conversación, ambiente bullicioso... Le hemos pedido a Carlos Maribona, @salsadechiles , su lista de imprescindibles en la capital de España. Esta es su selección.
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La Catapa
En la barra de esta casa del barrio de Retiro Miguel Ángel Jiménez desarrolla su habilidad como cocinero con una amplísima variedad de tapas y raciones, casi todas basadas en productos de temporada. El salmorejo o la tortilla de patata son de los mejores de Madrid. Pero hay mucho más, desde ensalada de pamplinas hasta boquerones en vinagre, desde enormes zamburiñas al horno hasta callos bien ortodoxos o riñones de cordero a la plancha. Y un buen surtido de vinos por copas.
La Catapa. Menorca, 14.
2
Vinoteca García de la Navarra
A espaldas del Ayuntamiento de Madrid los hermanos García de la Navarra, Pedro en la cocina y Luis al frente de la bodega, regentan esta vinoteca con una amplia barra en la que se sirven tapas y raciones tradicionales con una de las más completas ofertas de vinos de la capital, a precios más que razonables. Entre sus especialidades, impecables callos, matrimonio de buena anchoa y boquerón en vinagre, cremosas croquetas de jamón ibérico o de pollo, o ensaladilla rusa.
Vinoteca García de la Navarra. Montalbán, 3.
3
Álbora
Uno de los lugares imprescindibles para el tapeo de calidad, en el barrio de Salamanca. En su larga y amplia barra se puede empezar con una trilogía de jamones de Joselito (de tres años diferentes, para comparar) junto a otras chacinas de esta misma marca de Guijuelo como el lomo o la coppa. Y luego, una larga lista de pinchos y raciones, fríos y calientes, en los que se alterna tradición y modernidad. Además, buena carta de vinos.
Álbora. Jorge Juan, 33.
4
Laredo
Esta taberna es una de las de más calidad entre la abundante oferta del barrio de Retiro. Inicialmente en la calle Menorca, hace cuatro años se trasladaron a este local, más adecuado para una clientela de alto nivel económico que es la que abarrota esta casa. Amplia barra en la entrada y, subiendo unas escaleras, un comedor más formal. La oferta de vinos, a cargo de Miguel Laredo, es una de las más atractivas de Madrid. Entre las raciones más destacadas, el salmorejo y la ensaladilla rusa. También los mariscos del día, sobre todo las gambas, y las frituras.
Laredo. Doctor Castelo, 30.
5
Viavélez
El asturiano Paco Ron es un veterano y excelente cocinero que ha convertido la amplia barra de su restaurante, a un paso del estadio Bernabéu, en una verdadera tentación para el tapeo. Raciones bien elaboradas en las que la calidad de la cocina prima por encima de todo. Desde clásicos como las croquetas de jamón o de bacalao, la cazuela de fabada, las cebollas rellenas de bonito o los callos a la asturiana hasta sus peculiares mini hamburguesas «viajeras», acompañadas de cinco guarniciones. Buena selección de vinos por copas.
Viavélez. General Perón, 10.
6
Rafa
Más de 30 años lleva funcionando esta veterana marisquería, una de las más destacadas de Madrid. Además de sus comedores, dispone de una amplia y bien surtida barra en la que los mariscos, que se exhiben tentadores en la vitrina que da a la calle, son protagonistas destacados: desde ostras gallegas a gambas blancas de Huelva o rojas del Mediterráneo, pasando por un estupendo salpicón de marisco. La gran especialidad de esta casa es una ensaladilla rusa. Pero hay bastantes más cosas, incluido jamón de Joselito bien cortado.
Rafa. Narváez, 68.
7
Lúa
Este restaurante tiene en la planta superior una atractiva barra, con una carta pensada para tapear a cualquier hora en la que el protagonista es un pulpo a feira que probablemente es el mejor que se puede tomar en Madrid. Pulpos de buen tamaño que se cortan en trozos regulares, con una textura impecable, bien aliñados con aceite de oliva y pimentón. Además, empanada de zamburiñas muy ligera, que hacen a diario; cazuelitas de callos con garbanzos, o ensaladilla de mariscos.
Lúa. Eduardo Dato, 5.
8
Bar Alonso
Tras la modesta apariencia de un bar de barrio se encuentra un establecimiento muy atractivo para tomar el aperitivo. Abierto hace ya más de medio siglo, su actual propietario, hijo del fundador, ofrece en la barra un amplio surtido de buenas tapas y raciones tradicionales entre las que sobresalen especialmente las patatas bravas y los callos a la madrileña, que son para mojar mucho pan. También los populares torreznos, ensaladilla rusa, canapés de bacalao ahumado o de sardina marinada, y, si se tercia, algo de marisco del día.
Bar Alonso. Gabriel Lobo, 18
9
La Tierruca
Buena barra para el tapeo esta de la calle Ortega y Gasset en la que gozan de merecida fama las patatas bravas, sin duda entre las mejores de Madrid, bien fritas, crujientes por fuera y con una lograda salsa. Tampoco están nada mal las patatas con alioli, o una versión mixta que combina ambas salsas. Además, muy buenas frituras, especialmente los calamares, las gambas con gabardina y las berenjenas rebozadas. Como tapas frías, anchoas de Santoña, sardinas marinadas y boquerones en vinagre.
La Tierruca. Ortega y Gasset, 53.
10
El Fogón de Trifón
Aunque está más centrada en las comidas y cenas, esta taberna moderna y castiza a la vez dispone de una barra con una oferta muy apetecible por variedad y por calidad. Tentadoras raciones basadas en la tradición madrileña que incluyen croquetas de morcilla, caracoles, habitas con chopitos, ensalada de perdiz, rabo de toro al vino tinto, callos, mollejas de lechal, ensalada de pamplinas o algún marisco del día. Y para acompañarlas, una larga relación de los mejores vinos.
El Fogón de Trifón. Ayala, 144.
