Así es la Isla del Millonario: 1.500 euros por persona y noche
Viaje a Mnemba Island o Isla del Millonario, un refugio secreto y exclusivo en la costa de Zanzíbar
![Pícnic en la playa en Mnemba Isla, la Isla del Millonario](https://s3.abcstatics.com/media/viajar/2018/02/23/zanzibar-koUF--1240x698@abc.jpg)
Ajeno a la oscuridad medieval, Zanzíbar tan solo es la consecuencia evolutiva del encuentro de las grandes culturas orientales: India, china, persa o árabe ¿Su resultado? Un pueblo mercantil –el swahili– que se extiende desde la frontera entre Kenia y Somalia, en el norte, a Mozambique en el sur. Durante siglos intercambiaron oro, marfil o especias con cualquiera que osase adentrarse en el Océano Índico. Posteriormente llegarían los portugueses, los primeros europeos en colonizar Zanzíbar y quienes, por ejemplo, introdujeron el deporte de los toros a Pemba, una de las islas del archipiélago. O el sultanato de Omán, que convirtió a esta localidad en un almacén de esclavos y especias.
[Curioso: Seis islas privadas con hotel para desconectar del mundo]
A solo 4,5 kilómetros del extremo noreste de Zanzíbar se halla Mnemba, conocida como Isla del Millonario. Con solo 500 metros de diámetro y 1,5 kilómetros de circunferencia, esta pequeña isla está rodeada por un arrecife ovalado, conocido como el Atolón de Mnemba, un área de conservación marina.
![La habitación principal de una de las cabañas en la isla](https://s1.abcstatics.com/media/viajar/2018/02/23/private-beach-paradise-at-zanzibar-koUF--510x349@abc.jpg)
Para llegar hay que hacer un recorrido de 90 minutos en coche desde Stone Town a través de las exuberantes plantaciones de especias y veinte minutos en barco. En el interior solo encontraremos un hotel peculiar, Mnemba Island , con doce 12 Bandas o cabañas solo aptos para turistas ricos o buscadores de experiencias de lujo en silencio, sin zapatos. Su precio: unos 1.500 euros (1.760 dólares) por persona y noche en una Banda.
![Día de sol y hamacas en silencio y paz](https://s1.abcstatics.com/media/viajar/2018/02/23/zanzibar2-koUF--220x220@abc.jpg)
Con solo 24 huéspedes en un escondite romántico y privado , este es un lugar perfecto para amantes del buceo, la natación y el kayak; y también para los que anhelen masajes en la playa sin hacer nada, sin ruido, sin multitudes, con el gran océano en el horizonte.
«Si alguna vez has albergado el deseo secreto de encontrarte el único habitante de una hermosa isla tropical , pero sin el esfuerzo de tener que mover un dedo para valerte por ti mismo, Beyond Mnemba Island es el lugar perfecto para ti», dice la publicidad del hotel.
La capital de Zanzíbar
Stone Town, historia pétrea. Nombrada patrimonio de la Humanidad en 2000 , Stone Town es un entramado de callejuelas de piedra compuesta por más de dos millares de edificios. Como destacó la Unesco, esta ciudad es un magnífico ejemplo de los asentamientos comerciales swahili del litoral del África Oriental. No en vano, a día de hoy, aún conserva su tejidos y paisajes urbanos prácticamente intactos, que pone de manifiesto el peculiar entramado de la región, en la que se han fundido y homogeneizado a lo largo de más de un milenio elementos de diversas culturas.
Entre los principales monumentos destaca el museo palaciego (Beit al-Sahel), residencia oficial del sultán de Zanzíbar hasta 1964, cuando la dinastía fue derrocada. Desde entonces, sirve como un centro dedicado a la era del sultanato.
Playas para todos los bolsillos
Arena fina, aguas cristalinas y brisa marina. Las playas tanto de Jambiani y Paje , al sureste (destaca el hostal conocido como Teddys Place); como de Nungwi y Kendwa (Rocks Beach Hotel es la opción), al norte, son hogar de la mayor oferta para el gusto mochilero. Mientras, en Bwejuu , la exclusividad campea como bandera. Y aquí, The Palms se lleva la palma, nunca mejor dicho (cerca de 1.425 dólares la noche para dos personas en temporada alta). Menos turística que el resto del archipiélago, la playa de Mangapwani es uno de esos pequeños paraísos alejados del mundanal ruido. Para disfrutar entre baño y baño, qué mejor que disfrutar del parque forestal de Kiwengwa/Pongwe, al noreste de la costa de Unguja. Entre sus árboles, el canto de casi 50 especies diferentes de pájaros.
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