Acampar con todas las comodidades

La necesidad de disponer de determinado equipamiento y algunas de las incomodidades que lleva asociadas pueden ser alguna de las razones que hagan ir de camping una idea poco atractiva para algunos. Sin embargo, la continua evolución del sector turístico para adaptarse a las necesidades y demandas de los clientes ha dado con una fórmula ideal. El resultado, el llamado 'glamping', mezcla de las palabras 'glamour' y 'camping'.

Kampaoh es una empresa dedicada a esta modalidad de vacaciones que cada vez está ganando más adeptos. En este caso, la empresa ofrece este servicio dentro de un camping tradicional por lo que ambas opciones conviven en un mismo espacio en la mayoría de casos. Kampaoh dispone actualmente de nueve enclaves en la provincia de Cádiz. Ofrece la posibilidad de alojarse en unas tiendas con cama, electricidad, ropa de cama, toallas, menaje, nevera, mobiliario y otros elementos para salvar algunos de los inconvenientes de una acampada tradicional.

Juan Olmo, director de la zona sur de la empresa, habla de que este tipo de turismo atrae a dos tipos de clientes. Por un lado, «usuarios tradicionales de camping que buscan la comodidad de no tener que trasnportar sus cosas y encontrarse todo hecho». Por el otro, «estamos atrayendo un nuevo tipo de cliente más hotelero y que antes buscaba experiencias en hoteles o casa rurales que también busca el contacto con la naturaleza pero sin perder las comodidades. Como ofrecemos una mezcla de eso, de una experiencia en la naturaleza con la comodidad, estamos atrayendo a ese tipo de público».

Uno de sus reclamos es la sostenibilidad, tanto en el uso de materiales como en buscar minimizar el impacto sobre el medio ambiente. Esta es una circunstancia que cada vez suma más como atractivo turístico, de ahí que existan numerosas certificaciones que obliguen a cumplir criterios reales de sostenibilidad. «La gente cada vez busca que las cosas sean sostenibles, que tengan el menor impacto y también tenemos mucho público que se fija en eso» destaca Juan que añade que sus campings «se recogen en septiembre y es como si no hubiera pasado nada», destacando el cuidado en reducir al mínimo el impacto medioambiental.

El pasado año, Cádiz fue la provincia andaluza que lideró el ranking de campistas con una cifra superior a los 400.000 viajeros. Las previsiones para 2024 se mantienen en líneas similares, incluso mejores, pero no solo para el sector de los campings, sino para todo el turismo en la provincia.

Juan Olmo destaca que para Kampaoh «la previsión es superar los datos del pasado año. Los porcentajes de ocupación están siendo muy buenos». En un análisis del verano hasta ahora apunta que el mercado en el mes de julio fue «muy de última hora» y que para agosto está siendo «más previsor». En cualquier caso, será una vez que concluya la temporada alta cuando se pueda hacer el balance real.

Más allá de las buenas perspectivas del verano el 'glamping' es un sector en crecimiento. Para Juan, «el punto de inflexión fue la pandemia. Nos hizo darnos cuenta de que no todo son grandes hoteles y fuimos buscando esa naturaleza». Encontrar el equilibro entre ambas fórmulas parece la solución perfecta.