Los mejores capítulos de «Breaking Bad»
Celebramos el aniversario del fin de la serie con un repaso a sus episodios inolvidables
Celebramos el aniversario del fin de la serie con un repaso a sus episodios inolvidables
1
Felina (temporada 5, capítulo 16)
Se cumple un año de la emisión de «Felina», el capítulo que puso punto final a « Breaking Bad ». Y 365 días después ya podemos decir que las andanzas de Walter White han alcanzado con toda justicia la categoría de leyenda televisiva.
Comenzamos recordando el capítulo que puso el broche de oro a la serie de Vince Gilligan. "Fe" (Hierro). "Li" (Litio). "Na" (Sodio). Tres elementos para componer una season finale con tres magistrales actos en los que Walter White se coló en tres casas para arreglar viejas deudas, despedirse de su familia y tomarse, tal y como anunció, cumplida venganza.
"Sólo llévame a casa y yo haré el resto", decía en voz alta el maltrecho y exiliado Heisenberg en el décimo sexto capítulo de la quinta y última temporada. Los adinerados -a su costa- Gretchen y Elliott; su mujer Skyler y sus hijos; Todd, Lydia y la banda de Jack; y cómo no, Jesse. Con todos ellos irá saldando cuentas Mr. White antes de que comience a sonar Baby Blue de los Badfinger y el personaje de Bryan Cranston tosa por última vez en un laboratorio de metanfetamina.
2
Cat's in the Bag... (temporada 1, capítulo 2)
Pero a la hora de escoger entre tanta excelencia, puede que los más nostálgicos prefieran remontarse a los albores de Heisenberg. Allí encontramos pasajes como la muerte de Krazy-8 el primer hombre que asesinado a manos de Walter White. Un antes y un después en la historia del profesor de química que vimos en el tercer capítulo de la primera temporada «...and the Bag's in the River».
3
Crazy Handful of Nothin' (temporada 1, capítulo 6)
En esa primera temporada tampoco podemos dejar pasar aquel momento en el que cuando, con la cabeza recién afeitada, Walt hace volar por los aires la guarida de Tuco Salamanca con fulminato de mercurio. Allí empezó a morir el profesor y nacer el capo.
4
Better Call Saul (temporada 2, capítulo 8)
Habrá quien se incline por el capítulo en el que el peculiar abogado Saul Goodman, personaje que centra el spin-off, hace su genial irrupción.
5
4 Days Out (temporada 2, capítulo 9)
En aquellos ya entrañables inicios en la metanfetamina tampoco hay que olvidar esos momentos inolvidables en los que Walt y Jesse, pinche y chef, trabajan codo con codo. Entre estos encontramos pasajes míticos como cuando los dos se pierden en el desierto para cocinar durante varios días a destajo.
6
Phoenix (temporada 2, capítulo 12)
En la nutrida lista de muertes que nos dejaron las andanzas de Walter White una de las más impactantes, por lo que supuso para la evolución del pesonaje fue la de Jane. En el duodécimo capítulo de la segunda temporada, Phoenix, Mr. White deja que la novia de su compañero muera ahogada en su propio vómito.
7
One Minute (temporada 3, capítulo 7)
También hemos tenido finales de infarto con Hank de protagonista habitual. Ahí quedan marcados en episodio el que recibe la visita de los hermanos Salamanca y su hacha.
8
Fly (temporada 3, capítulo 10)
Aunque sin duda alguna el episodio más atípico que han vidido en sus cocinas Walter y Jesse fue aquel en el que están los cuarenta y tantos minutos de duración del capítulo cazando una mosca que se ha colado en su laboratorio.
9
Say My Name (temporada 5, capítulo 8)
Otra de las víctimas más ilustres de Heisenberg fue Mike, antiguo compañero, rival y socio al que en su huída hacia adelante Walt aniquila en Say My Name, el octavo capítulo de la quinta temporada.
10
Ozymandias (temporada 5, capítulo 14)
Precisamente Hank, el cuñadísimo al que dio vida Dean Norris, fue uno de los grandes protagonistas de aquel tiroteo en pleno desierto con funestas consecuencias que vimos en dos capítulos de la última temporada: «To'hajiilee» y «Ozymandias». Este último, dirigido por Rian Johnson (responsable de Looper y futuro director del Episodio VIII de Star Wars) es por méritos propios -y por aquella traumática secuencia familiar que culmina con el rapto de Holly- otro de los grandes episodios de la serie.
11
End Times y Face Off (temporada 4, capítulos 12 y 13)
Y sin olvidar el rocambolesco inicio de la serie, con Walter White encañonándonos en calzoncillos en mitad del desierto, o el arranque de la última temporada, un flashforward que rompía las reglas del juego temporal de la serie, si hay señalar el mejor momento de «Breaking Bad» puede que este sea el magistral díptico que forman los dos últimos capítulos de la cuarta temporada: 'End Times' y 'Face off'. Una ración doble y genial de cómo se las gasta el titiritero Heinsenberg.
Dos capítulos dirigidos por el creador de la serie Vince Gilligan y que arrancan con Mr. White atrincherado en su casa, acorralado por Gustavo Fring y su red. La pistola le apunta siembre a él mientras suena de fondo 'We Are Born When We Die' de Apollo Sunshine, cuando de repente...
Un capítulo en el que Heisenberg urde un plan maestro que terminará, en la siguiente entrega, con la tremenda ejecución del todopoderoso Gus. Para llegar al ansiado resultado muerte en la ecuación del profesor White hay dos factores fundamentales: Jesse y Hector Salamanca. Ambos danzarán al son que marca la privilegiada mente del profesor White prometiendo venganza a uno (Salamanca) y redención al otro (Pinkman).
La secuencia final de 'Face Off', la conversación telefónica entre Skyler y Walter White, que volveremos a ver más adelante pero desde la perspectiva del personaje de Anna Gunn, sirve de magistral epílogo a los dos mejores capítulos de la serie. Un remate delicioso en el que Heisenberg vive uno de sus momentos de máximo esplendor.
"Se acabó. Estamos a salvo. He ganado", proclama con una media sonrisa henchido de satisfacción. Y mientras en este caso suena 'Black' (de Danger Mouse y Daniele Luppi con Norah Jones, vemos como Mr. White se aleja triunfal en su modesto utilitario tras dejar la leyenda de Heisenberg por las nubes. Es entonces cuando la pantalla nos devuelve donde este extraordinario viaje empezó: al jardín de los White. Allí una maceta nos revela que llevamos ya dos capítulos siendo testigos de la mayor y mejor farsa de Heinsenberg. Una jugada maestra. Otra más.