cultura
Los libros restaurados regresan a la Biblioteca de Castilla-La Mancha
Los ocho ejemplares han permanecido en el Centro de Restauración y Conservación de Castilla-La Mancha todo el verano
Todos los años la Biblioteca regional participa en las campañas de restauración del patrimonio bibliográfico y documental que lleva a cabo el Centro de Restauración y Conservación de Castilla-La Mancha con un lote de libros antiguos que necesiten recibir tratamiento especializado debido a su delicado estado de conservación .
En esta ocasión han sido ocho los ejemplares del patrimonio seleccionados con diferentes grados de deteriodo para que la especialista Marisol Garrido hiciese una múltiples intervenciones.
El primero ha sido el « Codex miscellaneus », un manuscrito del siglo XI en pergamino con letra visigótica a dos tintas, que es el ejemplar más antiguo que se conserva en la Biblioteca y que ha necesitado ser intervenido tanto en la encuadernación como en el cuerpo de la obra.
El resto de libros son impresos publicados entre 1610 y 1688 en papel verjurado de una excelente calidad, aunque con distintos estados de deterioro. El papel utilizado en los ejemplares antiguos hasta mediados del siglo XIX se elaboraba de una manera artesanal con trapos de algodón y otras fibras trituradas, lo que ha favorecido que se mantenga en buenas condiciones a lo largo de los siglos, no así las encuadernaciones de piel y pergamino más expuestas al uso y a las condiciones ambientales.
De ellos destacan los « Diálogos de la naturaleza del hombre, de su principio y fin» de Raimundo Sebunde , impreso en 1616 en los talleres madrileños de Juan de la Cuesta, imprenta conocida por ser el lugar donde vio la luz la primera edición de Don Quijote de La Mancha.
Otra obra curiosa es la « Apología de la verdad » del poeta y pintor sevillano Juan de Jáuregui, a quien Cervantes atribuye su propio retrato. Se trata de un pequeño volumen de 44 páginas sin encuadernar , impreso por Juan Delgado en Madrid. También de una imprenta madrileña, -en concreto la de Antonio González de los Reyes-, es la « Vida y obras del venerable maestro Juan de Ávila », publicada en 1674 y que ha recuperado las cubiertas de pergamino originales, además de limpiar el cuerpo del texto en su totalidad.
Una de las joyas restauradas ha sido « Dell’arcano del mare » de Robert Dudley, publicado en Florencia en el año 1646. Es un compendio de los conocimientos sobre navegación que existían en la época y está considerado el primer atlas del mar impreso . La obra incluye una numerosa variedad de cartas de navegar y mapas con partes móviles muy frágiles que estaban algo deterioradas por el uso y que han sido restauradas a través de un trabajo muy complicado.
Sin embargo, el libro que presentaba mayor grado de deterioro eran los poemas de la única poetisa americana sor Juana Inés de la Cruz . Impreso en Zaragoza por Manuel Román en el año 1682, ha necesitado intervenciones tanto en la encuadernación, como el cuerpo de la obra.
También han sido restaurados el « Compendio de las tres gracias de la Santa Cruzad a », recopilado por Alfonso Pérez de Lara y publicado en Madrid por la Imprenta Real en 1610, y « Burlas de la fortuna » de Giovanni Francesco Loredano, impreso en 1688 para, según indica en la portada, probar nuevos caracteres de imprenta fabricados en España.