artes&letras castilla-la mancha

Toledo en Tánger

«Pasear por la intrincada medina de Tánger posee el sabor de callejear Toledo»

Toledo en Tánger a.p.

por amador palacios

Gregorio Marañón definía la panorámica de Toledo como un arrabal del Oriente. Y es una realidad palmaria e inefable que la diáfana perspectiva vista desde el Valle, por su nítido ahormarse en la colina, supera a la de todas las demás ciudades que se precian de poseer una visión pareja. No en vano afirmaba el gran poeta americano Ezra Pound, residente y enamorado de Venecia, que la ciudad más bella del mundo era la célebre urbe de los canales pero ¡antes de ver Toledo!

Coincidiendo con fin de año, he visitado Tánger durante unos días. A fuerza de zigzaguear por su medina y alcazaba laberínticas, trasegar arriba y abajo su admirable configuración, he asumido concomitancias entre estos dos enclaves, muy parecidos y también muy diferentes. Su historia se hunde en la noche de los tiempos. Sabemos que la de Toledo arranca en la Edad del Bronce, fue un importante centro carpetano, localizado en el Cerro del Bú. Fue romana, capital del Reino Visigodo y capital de la Taifa de Toledo. Justamente denominada, con razón, aunque matizando, Ciudad de las Tres Culturas. En su época de máximo esplendor sirvió de sede a la corte de Carlos V. Ya en tiempos más recientes se reveló como urbe que atraía grandemente a los viajeros románticos, que la recrearon en altas páginas literarias.

La leyenda de Tánger es riquísima. Primeros datos mitológicos apuntan que su nombre se debe a Tingé, esposa del gigante Anteo. Se cuenta que Hércules durmió en la gruta de su nombre, en el entorno tangerino, antes de apoderarse de las manzanas del Jardín de las Hespérides. Ha sido siempre un conglomerado urbano de variopinto signo: fenicio, cartaginés, romano, vándalo, bizantino, árabe. Estuvo bajo el dominio de Abderramán III, perteneció a la Taifa de Málaga y fue territorio almohade. Ya en el siglo XX, en razón de un condominio firmado por nueve países, fue durante unos años declarada Zona Internacional hasta la independencia de Marruecos en 1956, desapareciendo entonces el gobierno internacional y comenzando su decadencia.

Toledo y Tánger, claro, son muy distintas. Tánger abierta al mar, siempre a la vista España, urbe de luz azul, siendo Toledo, por el contrario, un casco urbano situado en zona esteparia y de tonalidad amarillenta. Si Toledo fue grande políticamente, sin cuajar nunca del todo en este aspecto, de eso hace ya muchísimo tiempo, lo que ocasionó que la ciudad se enranciase, ensombreciendo el recuerdo de su glorioso pasado. Tánger, empero, tiene reciente su prestigio de haber sido una ciudad internacional donde acudían espías, especuladores y, sobre todo, grandes artistas, como Paul Bowles, la Beat Generación, visitándola gentes de vistoso pelaje, como es el caso de los Rolling Stones y muchos otros de acreditada catadura: Tennessee Williams, Henri Matisse, Delacroix, nuestro Mariano Fortuny y un largo etcétera. Pero pasear por la intrincada medina de Tánger, pasar debajo de sus cobertizos, admirar sus graciosas y destartaladas construcciones, por supuesto posee el sabor de callejear Toledo. La sensación al pisar Tánger es igual a la de pisar Toledo.

Todos los días de mi estancia en Tánger me despertaba cada mañana, exactamente a las 5.55, una pura y basta megafonía, esa voz tenebrosa del muyahidín llamando a la oración. ¿Y sabéis qué evocaba en tan bronca y contundente llamada? Esos momentos de rauda vigilia me transportaban a esa potente sirena que oía bramar, muy temprano, cuando yo era chico y vivía en ese pequeño y humilde barrio que el vulgo apodaba «Corea». Esa sirena amplísima que largamente sonaba desde la Fábrica de Armas convocando a los obreros para el comienzo del trabajo, forjando sables y proyectiles cabe las beneficiosas y gloriosas aguas del celebrado Tajo.

Toledo en Tánger

Noticias relacionadas

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación