Cruce de declaraciones
Page: «Lo que está sucediendo es un trasvase de riqueza»
Y mientras el agua va bajando en los pantanos, las arenas movedizas continúan en el terreno político. El Partido Socialista afirmaba, a través de su diputada Josefina Navarrete, que los castellano-manchegos son «solidarios», pero no a costa de la «agonía» de los municipios ribereños de la cabecera del Tajo, que viven una situación «alarmante» por los problemas de abastecimiento.
La diputada contestaba así a las críticas del portavoz adjunto del grupo parlamentario popular Lorenzo Robisco, en una rueda de prensa en las Cortes pedía a los socialistas que no se reabra «la guerra del agua». «García-Page está pisando la arena de la playa en vez de la arena de los pantanos», afirmaba Robisco, que recordaba que el PSOE perdió dos oportunidades de garantizar el agua para Castilla-La Mancha: una al derogar el Plan Hidrológico Nacional, y otra al retirar la reforma del Estatuto de Autonomía.
El portavoz popular señaló que Castilla-La Mancha tiene un problema importante de agua, por lo que ha pedido que se recupere el sentido común porque «en España hay mucha agua», afirmó.
Por su parte, Josefina Navarrete precisó que «no queremos dinero; queremos agua para todos, pero también para Castilla-La Mancha». La parlamentaria socialista lamentó que se siga trasvasando en estos momentos y recordó que la ley marcó que en el momento en que la cabecera hubiera alcanzado los 900 hectómetros cúbicos de capacidad -lo que sucedió el 8 de marzo de 2014- el límite para trasvasar quedaría automáticamente establecido en los 400 hectómetros.
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, afirmó ayer que lo que está sucediendo en la comunidad autónoma con el trasvase del Tajo al Segura es «un trasvase de riqueza» y añadió que la región no permanecerá en «una posición resignada» viendo como el Tajo «se muere».
En una entrevista en Onda Cero, García-Page explicó que el tema del agua en España no lo ha abordado bien ni el PP ni el PSOE porque, si el país quiere trasvases de unos ríos a otros, «lo que no entiendo es porque no se hace de unos ríos a otros y solo hay uno», y puesto en marcha antes de la democracia «cuando nadie podía protestar».
«Dejarse de guerras»
La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente de Murcia, Adela Martínez-Cachá, dijo en un comunicado de prensa que habría que dejarse de «guerras del agua», en clara alusión al actual gobierno de Castilla-La Mancha en su deseo de acabar con el trasvase Tajo-Segura, «y avancemos a un pacto nacional del agua».