Penalización por grado y por cantidad
José Luis Martínez, presidente de la cooperativa San Dionisio de Fuente Álamo (Albacete) reveló que el año pasado su cooperativa implantó una penalización si la uva viene con menos grado del estipulado por variedad. «Este mecanismo no ha permitido mejorar el proceso de elaboración de vino desde su recogida en las cepas, ya que es el socio el primer interesado en ser asesorado por el técnico de campo de la cooperativa, quien determina el momento exacto de la recolección», explicaba.
Con todo, «levantamos la mano si el socio ha hecho una buena práctica del cultivo y, por circunstancias de la sequía o la climatología, ajena al agricultor, no le madura la uva». En ese caso, «no se le penaliza». Sin embargo, al que lleva a cabo una mala práctica «sí se le penaliza». Otra de las penalizaciones de esta cooperativa tiene que ver con la sobrecarga de los remolques, que José Luis Martínez situaba «por encima de los 15.000 kilos, con un margen de 2.000 kilos».