Nicolás: «Al empresario no se le puede exprimir más, su sacrificio ha llegado al límite»
«La pequeña y la mediana empresa y los autónomos hemos pagado un precio excesivo en esta crisis. Al empresario no se le puede exprimir más ni durante más tiempo. Su sacrificio ha llegado al límite». Así de rotundo se expresó ayer el presidente de la Federación Empresarial Toledana (Fedeto), Ángel Nicolás, durante la trigésimo octava Asamblea General Ordinaria.
A su juicio, «no hay más margen para incrementar la carga impositiva directa e indirecta que tenemos que soportar las empresas», ya que «esa carga impositiva afecta a nuestros procesos productivos de forma muy negativa». Por eso, arengó ante un salón abarrotado de empresarios: «Es la hora de las políticas de los estímulos fiscales. También es la hora de racionalizar lo que tenemos que pagar en cotizaciones sociales y que actualmente supone un ‘impuesto sobre el trabajo’».
Estímulos financieros
No se olvidó de que «también es el momento de los estímulos financieros», por lo que consideró «preciso que se canalicen fondos hacia el sector privado». Según Nicolás, «en la medida en que se dinamiza el sector privado, se fortalece la estructura empresarial y, por ende, la economía». Algo así como la pescadilla que se muerde la cola.
Reclamó la simplificación de los procesos burocráticos y trabajar con flexibilidad. «No podemos seguir padeciendo tortuosos procesos administrativos ni inspecciones constantes», se quejó. «Se debe desterrar el concepto de que el empresario es un defraudador nato», exigió, porque «solo así las normativas que nos afectan dejarán de ser pretextos para un control exacerbado».
Antes de llegar a ese punto, Nicolás se había referido a la mejoría económica en Toledo. «La opinión generalizada de la mayoría de las empresas de la provincia -aseguró- es que la recuperación no acaba de llegar». «Hay sectores que tienen un mejor comportamiento que otros. Y dentro de los sectores, hay subsectores que lo están pasando francamente mal», resumió antes de dar algunas pinceladas.
En cuanto a las propuestas para relanzar la economía y el empleo, Nicolás no dudó de que «todos» proponen sus recetas «para hacer las cosas lo mejor posible, desde la mejor voluntad y convencidos de que serán positivas». No obstante, el presidente de Fedeto pidió que «se haga de forma razonada y razonable y, sobre todo, con acierto, con eficacia y con eficiencia». En este contexto, apeló a la prudencia y a la moderación en las propuestas, principalmente en los planteamientos económicos.
También deseó que cuando se aborden cambios que afecten de manera directa a los empresarios, como pueden ser impuestos o el mercado laboral, «no se adopten medidas para las empresas al margen de la opinión de las empresas. Sería una grave equivocación».
En otro momento de su intervención, afirmó que «no hace falta ser un analista avezado para concluir que estamos inmersos en un movimiento de transformación vertiginoso y poco sosegado que, sin duda, es consecuencia de la crisis».
Regulaciones sensatas
No obstante, Nicolás tendió la mano al «diálogo constante» y al consenso «con todos» para aportar ideas para «evitar nuevas crisis y para establecer regulaciones sensatas que incentiven la inversión y el empleo». «Somos una entidad con la que se puede dialogar. Que suma, no resta. Que aporta, no quita», añadió el presidente de Fedeto, que pidió a sus compañeros ir de la mano juntos. «Los empresarios debemos estar unidos. Juntos somos voz, por separado: murmullo».