Tolón presenta el equipo para un Gobierno «a dúo» con Ganemos
Milagros Tolón compareció ayer por primera vez desde que fue elegida alcaldesa de Toledo y lo hizo para anunciar las competencias de su equipo de Gobierno, formado además de por sus compañeros socialistas, por los cuatro concejales de Ganemos.
El Gobierno de Tolón se divide en seis grandes áreas (Presidencia; Hacienda y Transparencia; Desarrollo Económico y Empleo; Seguridad Ciudadana y Protección Civil; Bienestar Social, y Promoción Sociocultural y Deportes) y tiene como «hombres fuertes» a José María González Cabezas, vicealcalde y responsable de Educación, Cultura y Patrimonio Artístico; Juan Alfonso Ruiz Molina, portavoz y titular de Urbanismo y Vivienda; José Pablo Sabrido, edil de Hacienda, y Juan José Pérez del Pino, que se encarga de Seguridad Ciudadana, Protección Civil y Deportes.
Entre el resto de concejales socialistas, Inés Sandoval es la viceportavoz y asume Igualdad y Empleo; Noelia de la Cruz se encarga de Obras y Servicios Públicos Medioambientales; Rosa Ana Rodríguez, de Turismo y Artesanía, y María Teresa Puig de Familia, Accesibilidad y Festejos.
En cuanto a los concejales de Ganemos, ya era pública la responsabilidad que van a tener. Javier Mateo es el titular del área de Bienestar Social y será concejal de Servicios Sociales. Dentro de esta área se ubica también Diego Mejías, responsable de Juventud y Cooperación, mientras que Eva Jiménez y Helena Galán están dentro del área de Hacienda y Transparencia. Jiménez es concejal de Servicios Públicos y Sostenibilidad; Galán, de Participación y Transparencia.
Equipo «muy preparado»
Tolón explicó que se trata de un equipo «muy preparado» y que a la hora de delimitar sus funciones tuvo en cuenta «la experiencia profesional» y «el perfil personal» de cada uno de ellos. Asimismo reveló que en Junta de Gobierno Local habrá ocho tenientes de alcalde, no habiendo decidido todavía los puestos (sí se sabe que Javier Mateo y Eva Jiménez, de Ganemos, ocuparán la segunda y sexta tenencia). En cuanto a los concejales que estarán liberados, la alcaldesa no reveló quiénes serán, pero sí que tanto el número como la asignación económica que reciben los grupos municipales se reduce un 50 por ciento respecto a la última legislatura.
Ubicación de los grupos
Otro asunto que surge cada legislatura es la ubicación de los grupos municipales de la oposición. El PP, dijo Tolón, se va a quedar en su actual sede de la Posada de la Hermandad, mientras que aún no se ha decicido la ubicación de Ciudadanos. Eso sí, según Tolón, «podrán trabajar en la oposoción muy dignamente».
Sobre las primeras acciones de Gobierno, la alcaldesa aseguró que va a «desbloquear» el suelo industrial que durante cuatro años ha tenido «paralizado» el Gobierno regional del PP, ahora en funciones. Y desveló que «la próxima semana» mantendrá una reunión con empresarios para la posible instalación de negocios en Toledo.
El crucifijo y la tirolina
Otro «bloqueo» del Gobierno de la Junta a la ciudad, siempre según la versión de la alcaldesa, que ahora impulsará Tolón será el centro de día y de salud del barrio de Santa Barbara. También «ampliará» el centro de día del Alzheimer y pedirá al Gobierno regional un plan de empleo. Tolón añadió que estos primeros días los va a dedicar a visitar a todos los funcionarios de la administración local. Ayer, empezó por los que trabajan en la Casa Consistorial.
Preguntada por las polémicas que en los últimos días jalonan la actualidad toledana, Tolón endureció el tono. La primera, la jura del cargo de los concejales el pasado sábado con o sin crucifijo, dependiendo de a qué partido pertenecían (los nueve ediles del PP fueron los únicos que tomaron posesión de su cargo con un crucifijo encima de la mesa). Para Tolón fue un «espectáculo bochornoso» el que el crucifijo se pusiera encima de la mesa o desapareciera según qué concejal jurara el cargo.
En cuanto a la tirolina instalada en el puente de San Martín, Tolón manifestó durante la campaña electoral que no le gustaba su ubicación. Preguntada por si tomará medidas para cambiar la instalación de sitio, la alcaldesa se mostró irritada y recomendó «no entrar en eso», pues «hay problemas mucho más importantes». Ahora bien, reconoció que ha pedido el expediente del contrato por si el cambio de ubicación no fuera muy lesivo para la economía del Ayuntamiento (tendría que pagar una indemnización), y bromeó al asegurar que ella no cruzará el río Tajo atada con un arnés.