Ramos será investido alcalde de Talavera con la abstención de Ciudadanos
El candidato del PP a la Alcaldía de Talavera de la Reina, Jaime Ramos, dio ayer un primer e importante golpe de efecto en las negociaciones de su partido con Ciudadanos al anunciar que el próximo sábado, a las doce horas, será investido alcalde de la ciudad gracias a la abstención de Ciudadanos. Este acuerdo puede desbloquear o aclarar otros importantes en la región, como Giadalajara o Cuenca, como también en al Diputación de Toledo, aunque todo eso está por ver porque cada caso tiene sus peculiaridades partidistas y personales.
De momento, Ramos, con su discreción habitual, explicó ayer en rueda de prensa que el grupo municipal popular y el que formará Ciudadanos en el Ayuntamiento, liderado por Jonatan Bermejo, han alcanzado un acuerdo por el cual esta última formación apoyará la investidura de Ramos con su abstención, permitiendo así que gobierne la lista más votada. Este acuerdo ha sido posible gracias a las conversaciones que se han mantenido en los últimos días y a la firma de un decálogo de condiciones de Ciudadanos.
En ese documento, Ciudadanos propone, entre otras cuestiones, separar de cualquier cargo a imputados por corrupción, prohibir las condonaciones de créditos bancarios a partidos políticos o elegir a los candidatos mediante elecciones primarias.
Entendimiento
«No es un acuerdo de gobierno, pero sí un muy buen comienzo para esta legislatura que nos va a hacer a todos ser dialogantes», señaló Ramos, quien desveló que además se ha firmado otro documento de medidas concretas para Talavera, con propuestas de participación ciudadana, transparencia, ayuda a las familias y reactivación económica.
El candidato popular aseguró que esta legislatura «nos va a obligar a entendernos» y que los cuatro grupos políticos con representación municipal tienen «muy claros» cuáles son los problemas de Talavera, por lo que cree que habrá una «política común» en todo lo que sean medidas para reactivar económicamente la ciudad.
Por su parte, Bermejo se mostró «orgulloso» del resultado electoral, ya que los dos concejales obtenidos le permiten mantener una posición «decisiva» para la elección del alcalde y del Gobierno municipal. Sin embargo, precisó que esta circunstancia, «lejos de ser un privilegio, es una enorme responsabilidad con aquellos que depositaron su confianza en nosotros para que hiciéramos las cosas de una forma honesta y diferente».
Favorecer a quien gana
Sobre este aspecto, aseguró que la llave que les interesa no es la del gobierno municipal, sino «la del cambio sensato y las medidas concretas para sacar adelante a Talavera y a los talaveranos». «Desde el principio nuestra intención ha sido facilitar el gobierno a la lista más votada, siempre que el partido ganador aceptara firmar nuestro decálogo para la regeneración democrática y una serie de medidas económicas y sociales que ayuden a la ciudad a salir del pozo de crisis y desempleo», manifestó el líder de Ciudadanos.
Según Bermejo, «lo más justo es respetar la voluntad ciudadana mayoritaria y no alcanzar acuerdos de perdedores con el mero objetivo de repartir un trozo de pastel, pues consideramos que lo más democrático es dejar la oportunidad de formar gobierno en manos de quien gana las elecciones y que actuar en sentido contrario sería faltar a nuestra palabra», aseguró.
Por último, Jonatan Bermejo indicó que se trata de un pacto para la investidura de Ramos en el que Ciudadanos no adquiere con el PP ningún compromiso de gobierno y no asumirá concejalías, de modo que se mantendrá en la oposición y las cuestiones que vayan surgiendo se acordarán «puntualmente».
«De cooperación, lealtad institucional, predisposición al diálogo y ejercicio de una oposición responsable, todo; de entrar en el gobierno a cambio de sillas o cargos, de pasteleo y mercadeo, nada», dejó claro el concejal electo de Ciudadanos.
