Un toro se escapa en Talavera y hiere a once personas; una, corneada
Un novillo se convirtió ayer en el protagonista de las ferias de San Isidro de Talavera de la Reina al escaparse de la plaza de toros y transitar por las calles adyacentes, donde causó once heridos de «diversa consideración», antes de que muriera arrollado en el puente del Príncipe.
El herido más grave es un paciente de 30 años, que sufrió una herida por asta de toro en su muslo izquierdo. Tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, aunque no se teme por su vida. También un niño de nueve años sufrió con traumatismo facial que, tras ser valorado, fue trasladado al Hospital 12 de Octubre de Madrid, según informó ayer el Hospital General Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina.
Del resto de heridos, aún permanecen ingresados una mujer de 63 años con traumatismo craneoencefálico y un varón de 70 años con politraumatismo y pronóstico reservado. Los otros siete heridos fueron dados de alta. Uno de los heridos es el padre del popular periodista Roberto Brasero.
Los hechos ocurrieron pasadas las 13.00 horas. A esa hora llegó a la plaza de toros de «La Caprichosa» el camión para desencajonar los novillos del concurso de recortes que se celebró por la tarde. Según aseguran desde la publicación «La Voz del Tajo» a este periódico, las puertas de la plaza estaban abiertas de forma inexplicable, lo que aprovechó el animal para escaparse y salir por la puerta de cuadrillas a la avenida de Castilla-La Mancha.
A continuación giró a la izquierda en dirección a la basílica, tomó el callejón que hay entre «La Caprichosa» y la basílica y atravesó los Jardines del Prado. Fue una suerte que el animal no entrara en el Recinto Ferial (que se encuentra a pocos metros de «La Caprichosa»), donde en esos momentos se celebraba el tradicional desfile de carrozas con la participación de miles de personas. Al parecer, fue en los jardines donde hirió a la mayoría de personas.
Después, el astado se dirigió hasta la rotonda que confluye con Salvador Allende y Ronda del Cañillo, e intentó cruzar el río Tajo por el puente del Príncipe. Finalmente, en el puente el animal murió tras ser atropellado con el coche por un agente de movilidad de del Ayuntamiento, según informó el Consistorio en un comunicado de prensa.
Hasta el lugar de los hechos se desplazó la Policía Nacional, la Policía Local, Protección Civil, una UVI e incluso un helicóptero sanitario, por si hubiese que trasladar a los heridos fuera de la ciudad. Según el comunicado del Ayuntamiento, el alcalde, Jaime Ramos, afirmó que la investigación de los hechos ha quedado en manos de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, que ya han abierto una investigación sobre el suceso para esclarecer las causas.
Ramos, que en esos momentos se encontraba con José Julián Gregorio, delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, en la misa en honor a San Isidro, se trasladó al hospital de Talavera para interesarse por el estado de salud de los heridos. Posteriormente, Ramos, Gregorio y el concejal de Festejos, José Luis Muelas, mantuvieron una reunión con todos los técnicos y facultativos sanitarios movilizados, así como con los efectivos del Cuerpo Nacional de Policía, Policía Municipal, Protección Civil y Cruz Roja.
La oposición socialista pidió responsabilidades «políticas» porque «nadie puede imaginarse que ocurra un fallo de seguridad tan grave como para que se escape un toro y deje varios heridos a su paso». «Preocupa mucho en qué manos estamos», dijo en un comunicado José Gutiérrez, secretario general del PSOE en la ciudad.
Mientras, Pacma criticó «los métodos empleados hasta conseguir reducir al animal, el cual, en lugar de ser controlado mediante el uso de dardos anestésicos, ha sufrido varios intentos de atropello y finalmente ha muerto arrollado por un vehículo del cuerpo de agentes de movilidad».
