«Un frentismo de izquierdas radical contra el PP»
La firma del llamado Pacto por la Sanidad Pública en Castilla-La Mancha por parte del PSOE, Ciudadanos, Podemos, IU y UPyD volvió a ser ayer comentado por parte de los responsables del Gobierno regional, después de que también la presidenta del Gobierno regional, María Dolores Cospedal, contestara a esta plataforma.
Ayer, el consejero portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, dijo que se trata de «un frentismo de izquierdas radical» contra el PP de la región. Criticó la escenificación de este pacto como «una más de las secuencias gráficas y testimoniales que ponen de manifiesto el frentismo de la izquierda en Castilla-La Mancha frente al PP» y que se suma a esos pactos que «hoy nadie discute y que están sobre la mesa».
En una plataforma con representanes de Podemos y del PSOE, Esteban arremetió contra ellos indicando que unos proponen modelos de gestión como los aplicados en aquellos países «donde se encarcela a la oposición», mientras que otros deben exponer los motivos por los que, «mientras en Castilla-La Mancha se destruía empleo durante 47 meses consecutivos, estaban callados».
También preguntó a los socialistas «por qué no tomaron medidas como gestores públicos para poder salir del atolladero en que se metió a la región».
Sanciones personales
También el consejero de Sanidad, José Ignacio Echániz, centró sus críticas sobre el PSOE. Explicó que en un pacto como el firmado el miércoles no puede estar el PP porque no se cumplen los tres requisitos que su partido exige, el primero «que haya sanciones personales proporcionales a la deuda que se deje», recordando los 5.000 millones de euros y las 600.000 facturas que el anterior Gobierno socialista dejó sin pagar en sanidad.
Entre sus requisitos, Echániz también incluyó que «en la sanidad pública no se gaste dinero en cuestiones de lujo asiático o suntuosas» -como los televisores Loewe encontrados en algunos despachos- y que la sanidad nunca vuelva a medirse «en kilómetros de ladrillo».
Con ello, el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales defendió que el Gobierno de Castilla-La Mancha «ha salvado la sanidad» e insistió en que «tiene futuro» porque este Gobierno se ha dejado piel», indicó Echániz, quien acusó a los partidos firmantes del pacto de hacer «utilización política de la sanidad pública».