PARADOR DE MOLINACospedal cumple su promesa y anuncia el proyecto definitivo
La presidenta regional aseguró, junto con el ministro Soria, que las obras comenzarán la próxima semana
Tras años de espera desde su anuncio en 2005, constantes reivindicaciones por parte de los molineses y los guadalajareños en general, una primera piedra y una maqueta que nunca llegaron a concretarse en la realidad, el proyecto definitivo del Parador de Turismo de Molina de Aragón, en Guadalajara, se presentó ayer en la iglesia de San Francisco en Molina de Aragón El acto, encabezado por la presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, acompañada por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, venía a poner fin a una larga etapa de promesas incumplidas y el sueño de muchas personas. Prescindiendo de actos simbólicos y de maquetas «que serían un insulto para los molineses», según recalcó la presidenta regional, durante la presentación se explicaron las características definitivas del edificio, y, sobre todo, cuando comenzará a construirse: la próxima semana. El edificio contará con 6.900 metros cuadrados repartidos en tres plantas con vistas al castillo de Molina de Aragón, servicio de recepción, zona de bienestar con baños turcos y saunas, 22 habitaciones, varios restaurantes y capacidad total para entre 300 y 500 personas.
El Prado de los judíos es la zona sobre la que se asentará el futuro parador, que estará construido con «materiales propios de la tierra, y que no parezca, como decían muchos molineses, un platillo volante en medio de Molina de Aragón», puntualizó Cospedal refiriéndose al anterior proyecto ideado por los socialistas José María Barreda y José Luis Rodríguez Zapatero como responsables de los Gobiernos regional y nacional. Un compromiso que ambos adquirieron tras el incendio en 2005 en Riba de Saelices y donde perdieron la vida once personas. Este hecho también fue recordado en el discurso de la presidenta regional, quien aseguró que el Parador de Molina es un símbolo de su recuerdo: «Es mucho más que un parador, es un símbolo. Del reconocimiento de lo que hicieron unas personas por nuestro medio ambiente; de once personas que en su día perdieron la vida; y de lo que llevan haciendo tantos y tantos hombres y mujeres de Molina de Aragón, de toda la comarca y de toda Guadalajara por sacar nuestra tierra adelante».
«Obras son amores, y no buenas razones. Y hoy estamos ante la constatación de una realidad, ante un compromiso que hasta el día de hoy no se había hecho efectivo», aseguró el responsable Turismo, que pidió explicaciones «a otros que gobernaron con anterioridad» –en referencia a Barreda y Zapatero– de por qué «durante seis años» no se construyó el parador «a pesar de que sí se puso la primera piedra». Por su parte, Cospedal rememoró que tras el suceso del incendio, fueron distintos los gobernantes que acudieron a la capital del Señorío a «prometer» un Parador «con ceremonias de primera piedra» aunque puntualizó que «será la próxima semana cuando veamos las primeras máquinas aquí».
Voces discordantes
Las palabras de «proyecto cercenado» o «proyecto mutilado» han estado presentes sobre todo en boca de los dirigentes socialistas desde que se comenzaron a saberse los primeros datos sobre el nuevo Parador de Molina de Aragón. La agrupación política se quejaba de la reducción de capacidad (de 80 a 22 habitaciones en el proyecto definitivo) y de servicios (en el primer proyecto se contemplaba un spa y una piscina cubierta), aunque poco se recordaba la deuda dejada por el anterior Gobierno en Paradores Nacionales (115 millones de déficit en 2011) ni el incumplimiento de Zapatero y Barreda, que contaron con seis años para hacer realidad el proyecto.
Aún así, durante el acto también estuvieron presentes el secretario provincial del PSOE, Pablo Bellido, acompañado del candidato socialista a la Alcaldía de Molina, Alfredo Barra. Bellido volvió a reivindicar los mismos puntos que durante meses llevan esgrimiendo desde su partido: «El PSOE no está en contra del parador de Molina. Todo lo contrario, estamos a favor. Por eso, apostamos por un parador que tenía sentido y era viable, con 80 habitaciones y servicios complementarios como un spa y una piscina cubierta». Además anunció que si llegan al Gobierno regional y municipal, se trazará una «hoja de ruta» para idear nuevos proyectos y servicios. Por su parte, el alcalde de Molina de Aragón criticó duramente estas quejas, recordando que lo gobernantes del PSOE «fueron incapaces de llevarlo a cabo».
A las puertas de la plaza de San Francisco donde se realizaba la presentación, se concentraron una treintena de personas abucheando y pitando con silbatos a la salida de los dirigentes políticos. Sin embargo, no consiguieron afear el gran día para Cospedal y Molina de Aragón.