El Sescam espera que el hospital de Toledo no se retrase con el recurso
El taller de arquitectura Sánchez Horneros ha vuelto a presentar un nuevo recurso contra el nuevo hospital de Toledo, según informó ayer el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), que confía en que el nuevo recurso no retrase la formalización del contrato para la puesta en marcha de las obras.
El Sescam desveló en una nota de prensa que este taller, que ya interpuso un recurso contra la licitación de las obras que fue desestimado por el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, ha vuelto a presentar un recurso especial en materia de contratación.
El taller de arquitectura Sánchez Horneros era el encargado de la construcción del hospital con el anterior Ejecutivo socialista hasta que se paralizaron las obras con el actual Gobierno regional.
A juicio del Servicio regional de Salud, esta decisión «pone de manifiesto, una vez más, los intereses particulares de dicha empresa, que los sitúa por encima y en contra de que los ciudadanos de Toledo cuenten lo antes posible con el nuevo hospital que se merecen y de los profesionales que esperan con ilusión el inicio de las obras».
Con ello, el Sescam confía en que este recurso no retrase el proceso, que se encuentra «muy avanzado», para que el nuevo hospital universitario de Toledo sea una realidad.
«No se entiende que se presente un recurso especial en materia de contratación sin haberse presentado al concurso», afirmó.
En este momento, el proyecto del nuevo hospital de Toledo se encuentra «a punto de formalizar el contrato». Además, el actual equipo del Sescam recordó que el proyecto que se encontró cuando llegó era «inviable» y «hubo que analizar el proyecto iniciado y hacer un nuevo planteamiento con sensatez y aprovechando al máximo los recursos existentes».
El Sescam apuntó que la oferta presentada por la UTE adjudicataria reduce en casi 92 millones de euros el gasto estimado por la Administración al licitar el concurso durante los 30 años de vigencia de la concesión, lo que supone un 4,5 por ciento menos sobre el presupuesto de licitación.
Por lo tanto, el coste de la concesión a 30 años, incluido el de la obra, supondrá un ahorro cercano a los 2.100 millones de euros con el nuevo proyecto respecto al elaborado por el anterior equipo de Gobierno, según el Sescam.