Los albergues buscan fórmulas para atraer más público
La red española de albergues juveniles es la segunda más importante de Europa, con tres millones de pernoctaciones al año en sus 260 alojamientos, que, en contra de lo que cabría pensar, no están ceñidos únicamente a jóvenes y cada vez reciben más familias que buscan calidad y buen precio.
Sesenta gerentes de Hostelling International analizaron ayer en el Castillo de San Servando, en Toledo, la situación del sector y cómo mejorar la calidad y atraer más público «a unas instalaciones muy buenas, muy confortables y a un muy buen precio», destaca Sergio Montoya, presidente de la red española de albergues juveniles.
Dinero, calidad y confort
El precio en estos albergues puede oscilar entre los 15 y 20 euros en régimen de pensión completa. «Es muy económico, teniendo en cuenta la calidad y el confort que se da», asegura Montoya, y se sustenta por el apoyo que prestan las distintas comunidades autónomas.
En el caso de Castilla-La Mancha, por ejemplo, la red de albergues juveniles dispone de unas 3.000 plazas en 28 alojamientos, 9 de ellos del Gobierno regional y otros 19 privados aunque casi todos tienen una gestión público-privada, según los datos que ofreció la consejera de Empleo y Economía, Carmen Casero, en la inauguración del encuentro de Hostelling International.
Aunque el alberguismo es «principalmente» para jóvenes, Montoya deja claro que «no se cierra la puerta de ningún albergue a ninguna persona que se quiera alojar» y, de hecho, afirma que debido a la situación económica muchas familias están eligiendo esta opción para sus fines de semana o vacaciones.