A ZAGA DE TU HUELLA
La comunidad de los carmelitas están desempeñando un papel digno de resaltar, no solo orgnizando actos sino como sede donde celebrar encuentros culturales
El pasado 23 de enero se presentó el tercer trabajo musical del coro «A zaga de tu huella» que se titula «Para siempre, siempre, siempre», que es una coletilla que solía emplear Teresa de Jesús. Este tercer cedé, compuesto de diez canciones, es un homenaje a la santa de Ávila con motivo del V centenario de su nacimiento, que se cumplirá el 28 de marzo.
El grupo toledano «A zaga de tu huella» está compuesto por los padres carmelitas descalzos Miguel y Ricardo y por las hermanas (hermanas de sangre, que no monjas) Sánchez de la Peña (Inmaculada, Ana y Teresa). El carismático director es el padre Miguel, que el sacerdote de la comunidad que suele celebrar sus misas acompañado casi siempre de un sintetizador del que extrae el sonido de numerosos instrumentos. Esta vez el grupo se ha incrementado con las colaboraciones de algunos chicos que participaron en el musical «Alma».
A la presentación, que tuvo lugar en el patio del convento de los Carmelitas en Toledo y estuvo muy bien dirigida por el periodista J. Guayerbas, asistieron muchísimas personas. El trabajo musical, como allí pusieron de relieve al interpretar algunas piezas, y más ahora que he tenido ocasión de escucharlo entero, es excelente y, por tanto, recomendable.
En este año teresiano los carmelitas descalzos están brillando por las muchas actividades que están llevando a cabo. Allí se presentó el libro de la académica correspondiente Renata Takkenberg, con fotos y textos breves sobre la vinculación de la santa abulense con Toledo.
Ahora han sacado este trabajo musical en homenaje a la reformadora del Carmelo (del que destacaría la canción «Vuestra soy», que es mi favorita y figura dos veces con diferentes intérpretes). Y el próximo 28 allí se celebrará la próxima tertulia organizada por el Ateneo Científico y Literario sobre el interesante (y desgraciadamente tan actual) tema de la tolerancia religiosa y la libertad de expresión.
La comunidad de los carmelitas están desempeñando un papel digno de resaltar no sólo organizando actos, sino también como sede donde celebrar encuentros culturales, allí en ese patio que está presidido por la genial escultura de Juan de la Cruz que hizo el académico, ya fallecido, Francisco García, Kalato. Vaya desde aquí mi reconocimiento.