Probamos el nuevo HTC One (M8)

Se trata de un terminal muy elegante que cuenta con una pantalla de cinco pulgadas y que sigue (y perfecciona) el camino mostrado por su predecesor, reconocido con múltiples premios.

Con un precio de 729 euros, está llamado a competir directamente con lo más granado de la gama alta -el iPhone 5S, el Samsung Galaxy S5 y el Xperia Z2- y poder capturar un poco más de cuota de mercado.

La parte trasera el curvada para favorecer el agarre. Está realizado en unsa sóla pieza de metal.

Al igual que el antecesor, tiene dos altavoces frontales pero más potentes. En teoría no haría falta conectar el móvil a un sistema de sonido extra, ya que los propios ofrecen una gran calidad de sonido.

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