La mitad de las empresas españolas no saca partido al análisis de los datos
El Informe Minsait sobre Madurez Digital en España 2019 muestra que el valor extraído del dato para el negocio de las empresas españolas es moderado: únicamente el 19% tiene un enfoque basado en aplicar la analítica más allá de la excelencia operativa
Estamos en la era de la información. Internet ha cambiado para siempre la manera de abordar el futuro de la economía. El análisis de la información de los clientes y la monitorización de sus procesos industriales son algunos de los desafíos más importantes a los que se enfrentan las empresas. Pero, pese a que se ha acelerado la transformación digital, todavía en España se está lejos de implementar un modelo de organización orientado al dato con la excepción de dos sectores que, por su naturaleza, han sabido sacarle provecho: el de las telecomunicaciones y el financiero.
Según el informe Minsait sobre Madurez Digital en España 2019 , empresa propiedad de Indra, el valor extraído del dato para el negocio de las empresas españolas es moderado. Únicamente el 19% tiene un enfoque basado en aplicar la analítica «más allá de la excelencia operativa». Hay mucho camino por recorrer a tenor de las conclusiones: únicamente el 46% de las compañías españolas concede al dato la importancia que merece en sus estrategias y disponen de programas definidos para beneficiarse de esta oportunidad.
La investigación pone de relieve que son pocas las empresas en España que hayan empezado a prestar atención a sus«capacidades para gestionar el ciclo de vida del dato». La observación, análisis y aprendizaje son, de nuevo, herramientas al alcance de todos los ámbitos y que contribuyen, según los expertos, a agilizar procesos. Más preocupante es otro de los resultados obtenidos en el estudio: el 19% de esas empresas aplica servicios de analítica más allá de lo que definen la «excelencia operativa», con lo que se escapan nuevas oportunidades para mejorar la eficiencia en los negocios. De hecho, en la mitad de los casos (el 54%) no existen siquiera programas internos relacionados con esta tecnología .
«La mayoría de las empresas españolas no cuentan con modelos de negocio diferenciales basados en la analítica y el dato, dado que se esfuerzan en las áreas más internas, como la protección del dato o la optimización de operaciones, pero tienden a desaprovechar el potencial del conocimiento del cliente. Y lo que es más grave, el valor extraído del dato para su negocio es moderado », advierten los investigadores. También se destaca que una empresa orientada hacia el dato no es únicamente incorporar servicios o herramientas tecnológicas, sino también cambiar metodologías y abordar nuevas manera de abordar los procesos industriales. «Consiste en hacer del propio dato y de la analítica parte de su estrategia de negocio, de sus sistemas, de sus procesos y de su cultura», añaden los investigadores.
Dichas compañías sustentan su éxito -revela el informe- en aspectos como sus ingresos incrementales por desarrollo de nuevos productos o servicios, el aumento del margen unitario a través de modelos de fijación de precios más dinámico o la reducción de las tasas de cancelación del cliente («churn», en el argot financiero). Cuestiones que se pueden abordar de manera más eficiente mediante el análisis de los datos mediante herramientas de Big Data. «Si tenemos en cuenta que el progreso de la economía española pasa por crear empresas competitivas a nivel global, y que el dato tiene y tendrá un papel cada vez más relevante en este objetivo, la criticidad de este activo para las empresas españolas se vuelve indiscutible», afirma Fernando Abril-Martorell , presidente de Indra, en el Informe Minsait.
El Informe muestra, sin embargo, que sólo dos sectores de la empresa española, Telecomunicaciones y Banca, destacan en su grado de avance. Pero para lograrlo han tenido que acometer grandes inversiones en nuevas tecnologías en los últimos años. Eso les ha servicio, en cambio, para plantear nuevas respuestas a los retos a los que se enfrenta cada negocio y poner en marcha nuevas propuestas de valor en diferentes ámbitos. «Construir un nuevo capital intangible en torno al dato permite perpetuar la competitividad de una empresa ante los nuevos "players" nativos digitales», recoge el estudio.
Con la llegada del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), de obligado cumplimiento desde el año pasado, las empresas han tenido que adaptarse a una era del dato, pero en esta primera fase se han centrado más en tratar y custodiar los datos personales que en sacarle más provecho a nivel interno. En general, la mayoría de las empresas tienden a limitarse a los mínimos exigidos por ley o por operatividad y desaprovechan el potencial de la analítica de datos en la palanca de competitividad clave: la relación con el cliente.
«Es necesario invertir no sólo en tecnología y herramientas, sino también en nuevos perfiles digitales; aterrizar la aportación de la analítica en proyectos bien definidos; generar sinergias y colaboración entre departamentos; desarrollar indicadores claves de rendimiento (KPIs) inéditos adaptados a los nuevos proyectos; y finalmente, incorporar los algoritmos y modelos predictivos a la toma de decisiones», añade Abril-Martorell. Entre las ventajas que desgrana el informe acerca del buen aprovechamiento de los datos empresariales se encuentran: lograr extraer valor de los datos y rentabilizar las inversiones realizadas, la optimización directa comercial, el el conocimiento del cliente, aumentar su velocidad en la toma de decisiones, ajustarse mejor a las necesidades de los clientes y generar sinergias alrededor del dato
Sobre organización, el informe apunta que mientras la dirección apoya la maduración de la aplicación del dato y la analítica en el 65% de las compañías, sólo un 23% de las empresas españolas reconocen tener un gobierno del dato sólido que asegure una calidad aceptable del mismo, y sólo el 17% ha implantado políticas de control, mantenimiento y mejora continua de los algoritmos. También se hace mención a la cultura y talento interno: sólo un 17% de empresas reconoce contar con suficientes perfiles especialistas del dato y la analítica. Asimismo, sólo un 28% reconoce una cultura de calidad del dato en su empresa y las nuevas formas de trabajo en torno al dato (nuevas metodologías, democratización, divulgación) sólo están implantadas en un cuarto de las compañías. Sobre tecnología, sólo un 30% de las organizaciones ha implantado tecnologías Big Data, y un 11%.