¿Qué significa la bandera del hacha de las feministas que boicotearon el acto de Irene Montero del 8M?
La bandera labrys, creada en 1999, es un símbolo del movimiento homosexual femenino que suele emplearse para diferenciar de la bandera arcoíris genérica
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Irene Montero y Ángela Rodríguez 'Pam' se vieron sorprendidas durante su charla en el Teatro Pavón de Madrid, en el acto institucional del Ministerio de Igualdad con motivo del Día Internacional de la Mujer por parte de un grupo de que las increpó por la 'ley trans'. Una de ellas llevaba una bandera que llamó mucho la atención: morada, con un triángulo negro en el centro y un hacha blanca de dos filos.
Esta enseña tiene mucha historia y para el movimiento lésbico es un símbolo muy importante. Se trata de la bandera labrys, un diseño usado por las mujeres homosexuales para reivindicar sus derechos específicos más allá del arcoíris genérico.
Según explica el blog 'Hay una lesbiana en mi sopa', detrás de esta bandera está Sean Campbell, un diseñador gráfico que la publicó por primera vez en 1999 para una edición especial de la revista 'Palm Springs Gay and Lesbian Times'. En ella aúna los símbolos que, tradicionalmente, se usaban para reivindicar los derechos lésbicos en la historia.
Los tres símbolos
La composición de la bandera cuenta con tres elementos básicos para el movimiento.
El primero es el color morado. Ya desde los tiempos antiguos se hablaba de las violetas como un símbolo para identificar a las mujeres que se gustaban entre sí, además de para sentirse protegidas si lo necesitaban.
El triángulo negro viene de los años del nazismo, cuando se usaba para identificar a las mujeres excluidas, como lesbianas, transgénero, prostitutas y, en general, mujeres que no se adaptaban a la normatividad esablecida.
Por último, el hacha de dos filos, o labrys, se venía usando en diversas sociedades tribales de formación matriarcal, especialmente en el este de Europa y Asia, como representación de la fuerza y poder de las mujeres en dichas sociedades. Por analogía, también se usó como símbolo general dentro del feminismo.