Un supermercado alemán ofrece minutos en su cámara frigorífica para soportar el calor
El precio que tienen que pagar los clientes para refrescarse es de tres euros por dos minutos
La ola de calor que se está viviendo durante las últimas semanas ha llevado a tomar medidas que rozan casi lo absurdo. Países poco acostumbrados a las altas temperaturas, como Reino Unido o Alemania, entre otros, se han visto obligados a cambiar sus rutinas en algunos aspectos. En el país que dirige Angela Merkel una de las medidas adoptadas ha sido que los profesores han trasladado las clases a lugares mejor climatizados, ya que el curso escolar empieza antes que en el resto de Europa.
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Sin embargo, lo que más llama la atención es la medida adoptada por un supermercado de Friedberg, localidad a unos 30 kilómetros al norte de Frankfurt, en el oeste de Alemania, que ha habilitado un espacio para que sus clientes puedan disfrutar del fresquito de su cámara frigorífica . Eso sí, cobrando, pues deshacerse del calor predominante durante dos horas se cobra a tres euros, tal como han mostrado varios medios alemanes, como Spiegel. Precisamente en conversación con ellos, el propietario de la tienda, Lars Koch, ha asegurado que no es un negocio rentable, pues solo ha obtenido 20 euros de beneficio.
«Se supone que es una broma, pero si alguien realmente quiere, puede entrar», comentó el propietario a medios alemanes. La zona está totalmente habilitada , pues ha colocado algunas sillas, mesa y sombrilla, y cuenta con un límite por persona, con un máximo de 10 minutos por 20 euros . La idea, además, surgió a raíz del humor, ya que varios clientes llegaban al supermercado quejándose por el calor, lo que animó al propietario a llevar a cabo esta medida.