Un sacerdote de Detroit «dispara» agua bendita para mantener la distancia social y mantener las tradiciones
Ocurrió en Pascua cuando se bendicen canastas de flores. Las imágenes, difundidas por otro religioso, se han hecho virales
Se llama Timothy Pelc, tiene 70 años, e s un sacerdote católico de Detroit (Michigan) y en estos tiempo de la pandemia del coronavirus se ha estado dedicando a «disparar» agua bendita con una pistola a los feligreses con el fin de que guardar el obligado distanciamiento social y mantener las tradiciones de esas fechas. Entre ellas está la de las canastas de flores. La acción del reverendo se produjo en la puerta del templo en Grosse Pointe Park Pascua , sin embargo se han hecho virales ahora, a raíz de las imágenes publicadas por la Iglesia de San Ambrosio que captó otro religioso.
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El padre iba bien pertrechado . Llevaba mascarilla, una pantalla, guante de látex, la Biblia en la mano , una máscara, careta y guantes de goma como precauciones adicionales contra la propagación del coronavirus.
Temía la reacción del Vaticano
Las fotografías han inspirado cientos de memes en las redes. En ellas se le ve disparando con la pistola a un hombre dentro del coche, en otras, a los tradicionales centros de flores que llevan en el maletero e incluso a un diablo. Pelc, en declaraciones al diario BuzzFeed News explicó que estaba un poco preocupado acerca de cómo podría reaccionar el Vaticano cuando vieran las imágenes en Internet. «Todavía no he escuchado nada» , manifestó, tras reconocer que «es un poco alocado».
El reverendero, q ue lleva en la parroquia 30 años , explicó que su idea original era hacer algo para los niños para que recordaran una celebración especial y divertida. Entonces se le ocurrió la idea de usar una pistola de agua para bendecir las canastas de Pascua de sus feligreses desde una distancia segura, y consultó con un médico de emergencias en Detroit.
A Priest giving social distance blessings with a squirt pistol and what, I'm assuming, is Holy water. 2020 folks. pic.twitter.com/iDnYs33hs9
— Jeff Barnaby (@tripgore) May 15, 2020
Este le dijo que era c ompletamente seguro y acudió con sus hijos con las flores en el coche. Otros fieles se acercaron y la iniciativa, una vez difundida en la redes sociales han tenido un amplio eco en todo el mundo.
«Se trataba de mantener la tradición y de brindar un poco de optimismo a quienes sienten una sensación de desesperanza durante la pandemia de coronavirus», ha indicado el sacerdote.
Ahora esta deseado de comenzar a celebrar misas , manteniendo las distancias con ayuda de los feligreses para ordenar el servicio, y con el aforo reducido, aunque reconoce que la gente aún tiene mucho miedo a contagiarse por el Covid-19, que ha azotado con dureza el estado de Michigan.
