Los restaurantes Frankie y Benny´s regalan la comida a los niños si los padres no usan el móvil
La iniciativa se ha puesto en marcha en los 250 locales de la cadena hasta el próximo 7 de diciembre
La cadena de restaurantes Frankie y Benny's está prohibiendo a los clientes usar sus teléfonos móviles mientras cenan. Para intentar conseguir este objetivo ha busacdo una fórmula ofreciendo comer gratis a los niños si los padres prescinden del teléfono. El restaurante americano-italiano anima así a los comensales a que se centren en sus amigos, familiares y comida cuando cenan.
Esta es la primera gran empresa en el Reino Unido en imponer el plan, y ofrece un bono de «niños comen gratis» a cualquiera que esté de acuerdo, informa el periódico Mirror.
La campaña se desarrollará durante una semana (del 29 de noviembre al 7 de diciembre) en los 250 restaurantes de la compañía, pero podría tener carácter permanente, dependiendo de cómo se desarrolle. Un portavoz de Frankie y Benny's señala que «vimos varias maneras en que podríamos alentar a las personas a participar más en la mesa, y hemos encontrado que dar a las familias la oportunidad de deshacerse de sus dispositivos por un par de horas es una excelente manera».
La propuesta se ha realizado después de que un estudio en todo el país descubrió que hasta el 72 por ciento de los niños desean que sus padres pasen menos tiempo en sus teléfonos y más tiempo hablando con ellos.
Una caja con cerradura
De manera preocupante, uno de cada diez consideraba que sus padres preferían ir a sus teléfonos a hablar con ellos y muchos admitieron haber ocultado sus teléfonos para tratar de obtener atención.
La experta en el cuidado de niños, Susan Atkins, asegura estar «encantada de ver que Frankie y Benny's están liderando el camino al prohibir las pantallas en la mesa. Vivimos en un mundo ajetreado, conectado digitalmente, a menos que tengamos la intención de no serlo, así que me encanta la idea de que las familias se sienten juntas , coman y conversen juntas fuera de las pantallas».
Después de estar sentados, los clientes recibirán una caja con cerradura para colocar sus teléfonos, lo que significa que sus dispositivos permanecerán cerca de ellos en todo momento. Si los comensales realmente no desean participar en la campaña, no tienen que hacerlo.
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