Reino Unido destinará 37 millones de euros a un ensayo de Desafío Humano que inoculará de forma deliberada el virus del Covid-19 en adultos sanos
Los detractores de estos ensayos consideran que infectar deliberadamente a alguien con una enfermedad contra la que no existe una cura no es ético
Los llamados Ensayos de Desafío Humano están rodeados de polémica, ya que consisten en infectar deliberadamente con un virus a personas sanas con el fin de probar la efectividad de un tratamiento. Pero a veces las circunstancias extremas precisan de medidas extremas , o ese parece ser el punto de vista del gobierno británico, que destinará unos 37 millones de euros (33,6 millones de libras) a un ensayo de este tipo con el fin de acelerar el desarrollo de una vacuna efectiva contra el Covid-19 .
En los estudios de desafío humano, «una vacuna candidata que ha demostrado ser segura en las pruebas iniciales se administra a un pequeño número de voluntarios adultos sanos cuidadosamente seleccionados que luego se exponen al virus en un entorno seguro y controlado», explicó este martes el Ejecutivo de Boris Johnson en un comunicado, en el que añadió que «los médicos y científicos luego monitorean de cerca el efecto en los voluntarios las 24 horas del día para ver exactamente cómo funciona la vacuna e identificar cualquier efecto secundario».
Según las fuentes gubernamentales, uno de los objetivos del equipo de investigación será descubrir cuál es la menor cantidad de virus que se necesita para causar la infección por Covid-19 , lo que se conoce como un estudio de caracterización de virus, para lo cual infectará con diferentes cantidades a pequeños grupos de jóvenes sanos de entre 18 y 30 años, que son los que tienen el menor riesgo de sufrir reacciones graves. «Los estudios se llevan a cabo bajo condiciones estrictas, que incluyen una entrada controlada a las instalaciones, una descontaminación cuidadosa de los desechos y un laboratorio exclusivo para realizar pruebas, todo lo cual ayuda a garantizar que el estudio se realice de manera segura. Todo el aire que sale de la unidad también se limpia, por lo que no hay riesgo para nadie fuera de la unidad», explica el texto.
«Estamos haciendo todo lo posible para combatir el coronavirus, con el respaldo de nuestros mejores y más brillantes científicos e investigadores en la búsqueda de una vacuna segura y eficaz», manifestó el ministro de Empresas, Energía y Estrategia Industrial, Alok Sharma, quien agregó que «la financiación anunciada hoy para estos estudios innovadores pero cuidadosamente controlados marca un importante paso en nuestra comprensión del virus y en la aceleración del desarrollo de nuestras vacunas más prometedoras que, en última instancia, ayudarán a comenzar nuestro regreso a la vida normal».
Por su parte, el doctor Chris Chiu, del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Imperial College de Londres e investigador principal del estudio, aclaró que esta investigación «puede aumentar nuestra comprensión del Covid-19 y acelerar el desarrollo de los muchos tratamientos y vacunas potenciales». Chiu aprovechó para aclarar que «nuestra prioridad número uno es la seguridad de los voluntarios» pese a que matizó que «ningún estudio está completamente libre de riesgos» y destacó su amplia experiencia en ensayos de este tipo: «Mi equipo ha estado realizándolos de forma segura con otros virus respiratorios durante más de diez años».
Los estudios comenzarían el próximo enero
La primera etapa de este proyecto, en la que podrían participar hasta 90 personas , se llevará a cabo mediante una asociación entre el Imperial College de Londres, la unidad de investigación especializada del Royal Free Hospital de Londres y la compañía hVIVO, filial de la biotecnológica Open Orphan, especialista en este tipo de pruebas. Si los reguladores, entre ellos la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA) y los comités de ética del NHS (el sistema nacional de salud) los aprueban, los estudios comenzarían el próximo enero y los resultados podrían estar listos en mayo.
Detractores sostienen que infectar deliberadamente a alguien con una enfermedad contra la que no existe una cura no es ético
No obstante, los detractores de estos ensayos consideran que infectar deliberadamente a alguien con una enfermedad contra la que no existe una cura no es ético, lo que se suma al hecho de que los voluntarios reciben un pago que muchas veces alcanza los miles de euros. Pero el gobierno asegura que Reino Unido es pionero en esta área y que «los ensayos de desafío humano se han realizado de forma segura durante varias décadas en miles de voluntarios en el estudio de enfermedades como la fiebre tifoidea, el cólera y la influenza». Estos se diferencian de los ensayos clínicos estándar en los que mientras en los primeros los voluntarios se vacunan para ver si desarrollan una enfermedad que circula entre la población, en los de desafío humano un pequeño grupo es inoculado en un entorno controlado.
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