Reino Unido aprueba la ley que permite a sus ministras cogerse la baja por maternidad
La fiscal general británica, Suella Braverman, se ha convertido esta semana en el primer miembro de un gobierno en cogerse una baja por maternidad
La fiscal general británica, Suella Braverman , se ha convertido esta semana en el primer miembro de un gobierno en Reino Unido en cogerse una baja por maternidad, en lo que ella misma calificó como «un momento decisivo» en la historia del país. Esto ha sido posible gracias a un cambio en la ley que fue promulgado por la Reina, ya que tal y como estaba anteriormente la habría obligado a renunciar a su cargo si decidía tomarse un tiempo para atender al que será su segundo hijo y recuperarse tras su nacimiento. El cambio, anunciado hace un mes por el gobierno, que justificó la decisión por considerar que las reglas estaban «claramente desactualizadas», ha sido aplaudida desde diferentes sectores, entre ellos grupos feministas y de mujeres profesionales. El propio portavoz del primer ministro Boris Johnson , que envió «sus mejores deseos» a Braverman, había manifestado en varias ocasiones que la ley anterior era «inaceptable».
Fuentes de Downing Street detallaron que el procurador general, Michael Ellis , asumirá el cargo de fiscal general durante los seis meses que Braverman, de 40 años y con un hijo que cumplirá dos años el próximo julio, estará de baja. La fiscal, que celebró en su cuenta de Twitter el poder «formar parte de la historia», es hija de inmigrantes de Kenia y las islas Mauricio que llegaron a Reino Unido en la década de los 60s, y su madre trabajó como enfermera en el NHS, el servicio nacional de salud, durante 45 años. Convencida pro-Brexit , estudió en Cambridge y trabajó en Nueva York como abogada, y su nombramiento como fiscal general por durante criticado por el Partido Laborista, que la consideraba «no apta» para el cargo.
Aprovechando la coyuntura, sindicatos, activistas y líderes empresariales han pedido una «revisión radical» de la política de permisos de maternidad y paternidad en el país, ya que consideran que las leyes actuales no son ayuda suficiente para las familias de los sectores menos privilegiados. «El sistema de permisos parentales del Reino Unido no es adecuado, millones de personas aún no tienen acceso al trabajo flexible y es difícil encontrar cuidado infantil de calidad, y para muchos es inasequible», aseveró Frances O’Grady, secretaria general de la Unión de Sindicatos TUC , mientras que Catherine Gregory de la organización Working Families, señaló que es necesario que el gobierno se tome en serio «la mejora del permiso parental para todo el mundo y no solo para una sola ministra del gabinete».