El PP dice que el decreto de lenguas es inconstitucional y llama a rebelarse
Alfonso Alonso ha recordado que una sentencia del Tribunal Constitucional deja claro que las administraciones «no pueden tener preferencia por ninguna de las dos lenguas oficiales»
El presidente del PP vasco , Alfonso Alonso, considera que el decreto sobre el uso del euskera y del castellano por parte de los ayuntamientos es «inconstitucional» y atenta contra las libertades de los ciudadanos, que a su juicio tienen que «rebelarse» para defenderlas.
Alonso ha comparecido en rueda de prensa en Vitoria un día después de que el Gobierno Vasco diera a conocer el decreto que regula cómo los ayuntamientos vascos tienen que ordenar el uso de las dos lenguas oficiales en sus relaciones internas y externas en función de la realidad sociolingüística de los municipios, siempre respetando el derecho de los ciudadanos a relacionarse con la Administración en ambos idiomas, ha informado Efe.
Según explicó el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, un ayuntamiento podrá reunirse en euskera, acordar en euskera y notificar y comunicar en euskera «pero tendrá que tener a disposición de la ciudadanía también la versión castellana de ese acuerdo y darle publicidad».
Alfonso Alonso ha expresado su perplejidad por este decreto que, a su juicio, es inconstitucional porque contraviene las leyes y «lesiona» derechos fundamentales de los ciudadanos porque son estos los que tienen el derecho a utilizar la lengua oficial de su preferencia en sus relaciones con la Administración.
A su juicio, el decreto también engloba a los beneficiarios de subvenciones o titulares de concesiones administrativas
«No existe el derecho de la Administración a utilizar una lengua con preferencia sobre otra», ha incidido el líder del PP, quien ha acusado al Gobierno Vasco de permitir que se atribuya a los ayuntamientos la capacidad de elegir el uso preferente de los idiomas oficiales e imponerlo a la población.
Ha aludido a una sentencia del Tribunal Constitucional contra el Estatuto catalán en la que se deja claro que las administraciones «no pueden tener preferencia por ninguna de las dos lenguas oficiales».
A su juicio, el decreto no solo se refiere a la lengua de uso en el trabajo interno de las administraciones locales ni a la comunicación con los vecinos, sino que también engloba a los beneficiarios de subvenciones o titulares de concesiones administrativas.
Así, ha puesto como ejemplo que un ayuntamiento podrá decretar que «un kiosko de la ONCE» que tiene una concesión administrativa utilice una lengua u otra para dirigirse a los ciudadanos. «Un absoluto disparate», ha enfatizado.
«Tiene que haber alguna reacción de la gente para defender sus libertades», ha remarcado sin concretar más.
«Deslealtad»
Ha asegurado que entiende que el PNV haya aprobado este decreto por su «deslealtad» y porque busca la «imposición» sobre los ciudadanos pero ha reprochado al PSE, socio del Gobierno Vasco, que se doblegue a ello. «No tengo confianza en los socialistas», ha subrayado.
Alonso ha anunciado que su partido está analizando el decreto para ver la «manera» en la que se puede recurrir.
También se ha pronunciado sobre el borrador del nuevo estatuto vasco que los expertos encargados por el Parlamento Vasco tienen que presentar la próxima semana. «Vienen curvas» , ha aseverado, al tiempo que ha augurado que la propuesta desbordará la Constitución porque reconocerá el derecho de autodeterminación. «Al Estado se le va a abrir un nuevo frente aquí», ha vaticinado Alonso.
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