El Papa alerta sobre el «pequeño Herodes que todos llevamos dentro»
Pide «no afrontar las dificultades sacando lo peor de nosotros»
El Papa ha recordado que «la historia está llena de personajes que, viviendo a merced de sus miedos, intentan superarlos ejerciendo el poder de forma despótica y con violencia inhumana». Por eso, en su última audiencia general del año 2021, ha alertado del «pequeño Herodes que todos llevamos dentro».
El Papa no ha utilizado paños calientes para referirse al rey que ordenó la matanza de los inocentes. «Quiso defender su poder y su pellejo con una crueldad despiadada. Ejecutó a una de sus esposas, a algunos hijos y a cientos de opositores. Es un hombre cruel que sólo tenía una receta para resolver los problemas: asesinar».
«Es el símbolo de tantos tiranos de ayer y de hoy; para ellos las personas no cuentan, cuenta sólo el poder, y si lo ven en peligro, asesinan a la gente. Y esto ocurre también hoy, no tenemos que remontarnos a la historia antigua para encontrarlos», asegura el Papa.
«No debemos pensar que somos como Herodes sólo si nos convertimos en poderosos tiranos», recordó. «Se trata de una actitud en la que todos podemos caer cuando intentamos ahuyentar nuestros miedos con arrogancia, aunque sea verbal o hecha de pequeños insultos para mortificar a quienes tenemos cerca».
El Papa ha opuesto a la arrogancia de Herodes la valentía de San José, cuando tomó a la Virgen María y al Niño y se marchó precipitadamente a Egipto para escapar de los soldados del rey.
«En la vida siempre encontraremos problemas y adversidades , y ante ellas podemos sentirnos amenazados o con miedo. Pero no las superaremos sacando lo peor de nosotros, como hace Herodes», ha aconsejado el Papa.
«Es un error común pensar que el valor es la virtud exclusiva del héroe. En realidad, la vida cotidiana de cada persona requiere valor para afrontar las dificultades de cada día», ha recordado.
Evocando esa fuga de la Sagrada Familia a Egipto, el Papa ha pedido pensar «en quienes hoy sienten esta inspiración dentro: escapa, escapa, escapa porque aquí hay peligro», y deben marcharse de sus casas a causa de «la arrogancia y la violencia de los poderosos».
«Pensemos en tantas víctimas de las guerras que quieren huir de su patria y no pueden; pensemos en los emigrantes que inician ese camino para ser libres y muchos acaban su vida en la carretera o en el mar» ha propuesto el Papa. «Pensemos en el Niño Jesús en los brazos de José y María mientras escapan. En él vemos a cada uno de los migrantes de hoy», ha repetido. «No podemos cerrar los ojos a la migración, es un escándalo de la humanidad».