El obispo de Gerona aplaza el inicio de la misas hasta el 30 de mayo por la dificultad para organizar el aforo

El Obispado de Gerona ha aplazado el inicio progresivo de las misas con presencia de fieles al fin de semana del 30 y 31 de mayo . La decisión llega después de que la Generalitat admitiese este miércoles que algunas regiones de Cataluña no podrían entrar el próximo lunes en la Fase 1 de desescalada. En esta etapa del proceso de desconfinamiento está permitido el culto público con un aforo del tercio de la capacidad del templo.

Ante la evolución de la pandemia, su obispo Francesc Pardo ha optado por el regreso de los fieles a los templo en la celebración de Pentecostés. En un comunicado la diócesis, señala que "la situación sanitaria de la pandemia no es la misma en las diferentes comarcas que configuran el Obispado de Girona" y que se prevén "muchas dificultades para organizar la presencia de los fieles con un tercio del aforo de los templos".

Entre sus razones, el obispo también recuerda "que la avanzada edad de buena parte de los sacerdotes y diáconos invita a considerarlos personas de riesgo" y que para poder celebrar la misa con las medidas de seguridad e higiene en los lugares de culto que piden las autoridades sanitrias es necesario "tener los medios necesarios y organizarse".

“Todos tenemos un gran deseo de devolver a las celebraciones comunitarias de nuestra fe, pero el amor a los demás y a uno mismo nos exige velar con mucho cuidado y prudencia para salvaguardar la salud de todas las personas”, reconoce el obispo.