Nuevos récords en la concentración de gases de efecto invernadero

Los niveles de dióxido de carbono, Metano , Óxido Nitroso alcanzaron niveles históricamente elevados

Chimeneas expulsando humo en Moscú (Rusia) EFE

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La concentración de gases de efecto invernadero sigue batiendo nuevos récords superando, en 2018, el crecimiento medio de los últimos diez años, según las últimas mediciones comunicadas este lunes, en Ginebra, por la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Los científicos no prevén una inversión de esta tendencia en los próximos años.

Todos los récords de concentración de este tipo de gases, que tienen la función de atrapar el calor en la atmósfera y que son los principales responsables del cambio climático , se pulverizaron el año pasado. Los niveles de dióxido de carbono (CO2), Metano (CH4), Óxido Nitroso (N20) y otros gases alcanzaron niveles históricamente elevados.

« No hay indicios de que se vaya a producir una desaleración , ni mucho menos una disminución de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera a pesar de todos los compromisos conseguidos dentro del marco del Acuerdo de París sobre cambio climático», manifesto el Secretario General de La OMM, Petteri Taalas.

Taalas declaró que «hay que pasar a la acción si se quiere preservar el destino de la humanidad porque las cifras comunicadas por el Boletín de la OMM sobre los Gases de Efecto Invernadero han mostrado que el promedio mundial de dióxido de carbono (CO2) alcanzó 407,8 partes por millón (ppm) en 2018 frente 405,5 ppm en 2017».

Las concentraciones de metano y óxido nitroso se dispararon y llegaron al nivel más elevado de la última década

El simbólico umbral de 400 ppm de CO2 fue sobrepasado en 2015 y la tendencia observada a la alza no hace sino acentuarse. Este gas tiene la característica de permanecer en la atmósfera durante siglos y aún más tiempo en los océanos. Por otro lado, las concentraciones de metano y óxido nitroso se dispararon y llegaron al nivel más elevado de la última década.

Además, de acuerdo con datos facilitados por la Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera de Estados Unidos, (NOAA) desde la década de los noventa se ha constatado un incremento del 43% de los gases de efecto invernadero de larga duración . El CO2 es responsable, en casi el 80%, de este incremento.

Taalas, recordó, que «la última vez que hubo en el planeta una concentración de CO2 comparable fue hace alrededor tres millones de años cuando la temperatura de la tierra era 2° o 3° C más cálida y el nivel del mar era 10 o 20 metros superior al actual». El dirigente de la OMM, subrayo la disparidad, cada vez mayor, entre los objetivos acordados y la realidad.

Quema de combustibles fósiles

Titulado «Unidos en la Ciencia», el informe concluye que se confirma el papel predominante de la quema de combustibles fósiles, formados hace millones de años de materia vegetal, en el incremento del dióxido de carbono atmosférico . Su combustión aumenta los niveles de CO2 en la atmósfera.

Durante 2018, el CO2 , principal gas de efecto invernadero de larga duración en la atmósfera, cuya presencia está directamente relacionada con la actividad humana, alcanzó un nuevo valor máximo, 407,8 ppm, un 147 % más respecto al nivel de la era preindustrial , alrededor de 1750, indicó el estudio de la OMM.

Por su parte el metano (CH4), que representa el 17% de las emisiones, rozó valores máximos de 1869 partes por mil millones (ppb) que lo colocaron a un nivel 259% mayor que en 1750. El 40% de emisiones de este gas proviene de fuentes naturales y el 60% de actividades antropogénicas como la cría de ganado, cultivo de arroz o vertederos.

Finalmente la concentración de óxido nitroso (N20) fue, en 2018, de 331,1 ppm que equivale a 123% más que los niveles de 1750. Su aumento fue el mayor observado durante el último decenio. Este tipo de emisiones provienen de fuentes naturales, alrededor del 60%, y de actividades antropogénicas, el 40%.

El N2O, contribuye significativamente a la destrucción de la capa de ozono que recubre el planeta, que nos protege de los rayos ultravioleta y de los efectos nocivos del sol. La OMM no prevé una mejora en las emisiones de gases de efecto de invernadero si se siguen manteniendo las políticas climáticas actuales.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación