Nieva en las Azores en pleno mes de junio
La Montaña del Pico, el punto más alto de Portugal, aparece cubierta por un manto blanco y con -2 grados de temperatura a una semana del comienzo del verano
Estamos a las puertas del solsticio de verano, que acontecerá este sábado 20 de junio a las 23.44 hora peninsular española, pero un inesperado giro climático ha llevado la nieve al corazón de las Azores.
El archipiélago portugués, compuesto por nueve islas que constituyen una de las dos únicas regiones autónomas del país vecino (la otra es Madeira), tiene en su territorio el punto más alto de la cuna del fado. Y ahí, en la Montaña del Pico, frente a Faial, se ha producido el insólito fenómeno meteorológico en estas fechas por estos lares.
El guía turístico local Renato Goulart se disponía a realizar su trabajo de forma rutinaria, pero se quedó estupefacto al vislumbrar el manto blanco que cubría el maravilloso lugar, ubicado a 2.351 metros de altitud.
Fue este domingo 14 de junio cuando los termómetros descendieron hasta los dos grados negativos , tal cual pudo comprobar este hombre a las nueve de la mañana (dos horas menos en relación a Madrid), quien no desaprovechó la oportunidad de compartir las imágenes de la nevada a través de su cuenta de Facebook.
El hallazgo le granjeó un elevado impacto a Goulart, ansioso por divulgar lo que acontecía sobre el terreno, pues suele ejercer sus labores en semejante enclave de la Isla del Pico, en el grupo central de las islas azorianas.
El sorprendido empleado subió a las proximidades de la cumbre, en un volcán de aspecto imponente en medio de un impresionante reino de la naturaleza, y después escribió en las redes sociales escuetamente: “Verano de nieve. No quiero bajarme de aquí”.
Los 2.351 de la Montaña del Pico son solo la punta del iceberg, de acuerdo con la expresión que resume su fisonomía completa. Sí, porque su altura total son casi 5.000 metros, lo cual quiere decir que la mitad de ellos están sumergidos en las profundidades del Océano Atlántico.
Se trata de un volcán con unos 750.000 años de antigüedad, que entró en erupción por última vez en el siglo XVIII. Una muestra espectacular del entorno imponente de esta isla.
El archipiélago lleva cinco días sin registrar ni un solo caso de coronavirus, porque funcionó el blindaje al que fue sometido por el Gobierno regional. De hecho, no ha sido hasta este lunes 15 de junio que se ha levantado la prohibición de realizar vuelos con el Portugal del continente desde los dos aeropuertos principales: el de Ponta Delgada y el de Terceira, en la ciudad de Angra do Heroísmo, reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.