Mallorca adelanta el cierre de los bares a las 18.00 horas y el de los comercios a las 20.00
Cuenta con la tasa de incidencia del virus más alta de España, 607 casos por cada 100.000 habitantes
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La presidenta del Gobierno balear, la socialista Francina Armengol, ha anunciado este domingo nuevas restricciones en Mallorca, para intentar detener el avance hoy imparable de la pandemia en la isla mayor del Archipiélago. Así, ha explicado que el cierre de bares y restaurantes en Mallorca se adelanta desde el martes a las 18.00 horas. En la actualidad, dichos establecimientos debían cerrar a las 22.00 horas, excepto los fines de semana y las vísperas de festivos, en que debían hacerlo ya a las 18.00 horas para evitar los «tardeos».
Por lo que respecta a los comercios y las grandes superficies, también desde el martes deberán cerrar sus puertas en Mallorca a las 20.00 horas. En cuanto al toque de queda, se mantendrá sin cambios en la citada isla, es decir, a las 22.00 horas. Las nuevas restricciones serán aprobadas mañana en el Consejo de Gobierno ya previsto. Cabe recordar que desde el pasado 15 de diciembre Mallorca se encuentra en el máximo nivel de alerta sanitaria —cuatro—, al hallarse en una situación de riesgo extremo.
Las nuevas medidas anunciadas este domingo tendrán una vigencia inicial de quince días, hasta el próximo 11 de enero.
Armengol ha especificado que a pesar de las nuevas restricciones horarias en los bares y restaurantes de Mallorca, dichos establecimientos podrán ofrecer «take away» hasta las 22.00 horas y servicio a domicilio hasta las 00.00 horas. De momento se mantiene sin cambios la disposición actualmente vigente que establece que en el interior de esos locales no puede haber clientes, mientras que en las terrazas está permitido un aforo del 75%. Por lo que respecta a los comercios, quedarán exentos de cerrar a las 20.00 horas los considerados esenciales, así como las gasolineras. Finalmente, una limitación que sólo afectará a los centros comerciales y a las grandes superficies es que no podrán abrir los fines de semana y los festivos.
Las islas de Menorca, Ibiza y Formentera están mejor que Mallorca, pero su situación epidemiológica tampoco es buena. Así, Menorca está actualmente en el nivel tres de alerta sanitaria, mientras que Ibiza y Formentera se encuentran en el nivel dos. En esta última isla, además, un brote que nació de una comida celebrada tras un velatorio ha hecho que los nuevos casos hayan crecido exponencialmente en apenas unos días. En ese contexto, Formentera pasará el martes al nivel tres —riesgo alto—, mientras que Menorca e Ibiza no experimentarán ningún cambio en ese sentido.
En estos últimos días, Baleares ha sido, además, la comunidad española con mayor incidencia acumulada de casos de coronavirus. Así, la incidencia acumulada a 14 días era el pasado viernes de 462,8 casos por 100.000 habitantes, lo que representó un incremento del 40% con respecto a los datos contabilizados ocho días antes, en que en el Archipiélago había una incidencia acumulada de 328,7 casos. Otro dato a recalcar es que el pasado miércoles se contabilizaron un total de 604 nuevos casos de Covid-19 en Baleares, lo que supuso el récord de contagios en un solo día desde el inicio de la pandemia.
Punto de inflexión
Armengol ha comparecido en rueda de prensa junto a la consejera de Salud, la socialista Patricia Gómez. En primer lugar, ha recordado que desde marzo han fallecido 457 personas en el Archipiélago a causa del coronavirus. A continuación, tras agradecer una vez más el esfuerzo de los sanitarios y el sacrificio de la ciudadanía, Armengol ha indicado que con las medidas anunciadas este domingo relativas a Mallorca se pretende «evitar la relajación social y las aglomeraciones al máximo».
A lo largo de su alocución, ha recalcado que la incidencia acumulada a 14 días en la isla mayor del Archipiélago es ahora mismo de 607 casos por 100.000 habitantes, con una positividad del 9,2%. Eso supone contar con la tasa de incidencia del virus más alta de España. La incidencia acumulada en Formentera es también muy alta, con 586 casos por 100.000 habitantes y una positividad del 17,2%, mientras que en Ibiza y en Menorca la incidencia es de 144 y 132 casos respectivamente. «Tenemos una situación altísima de contagios», ha reconocido Armengol.
El punto de inflexión negativo en Baleares cabe situarlo, como ha ocurrido en otras comunidades, en el puente de la Constitución. Las primeras decisiones para intentar atajar la actual tercera ola se tomaron justo después de dicho puente. Así, el Govern decidió adelantar el toque de queda en Mallorca a las 22.00 horas a partir del 9 de diciembre.
Esa restricción se mantuvo durante la Nochebuena y la Navidad, así como también la limitación de un máximo de seis personas en las comidas familiares. Ambas medidas serán prorrogadas en Mallorca hasta el próximo 11 de enero, lo que significa que no habrá ningún cambio en Nochevieja y en Año Nuevo. En ese contexto, Armengol ha apelado una vez más a la «responsabilidad» de toda la ciudadanía para cumplir también las restricciones en ambas fechas.
Más allá de las medidas que entrarán en vigor el próximo martes, cabe recordar que hace una semana se habían endurecido las sanciones económicas para las infracciones de la actual normativa anti-Covid cuando una isla esté en el nivel máximo de alerta sanitaria. Así, las faltas leves podrán ser sancionadas con multas de hasta 60.000 euros en esa situación. A ello habría que añadir que el pasado miércoles se inició el despliegue progresivo de 377 informadores para incidir en las medidas de prevención.
