La justicia británica permite a un hombre con autismo ejercer su derecho a tener sexo pese a sus «errores»
Un psicólogo señala que no puede entender que intentar tener relaciones sexuales sin consentimiento puede ser un delito penal
El Tribunal de Protección de los Juzgados Centrales de Familia de Londres dictaminó que a alguien que no puede entender qué es el consentimiento se le debe permitir tener relaciones sexuales . La jueza dictaminó sobre un caso concreto en el que un hombre, que tiene autismo con problemas cognitivos tiene un «derecho fundamental al sexo».
El tribunal considera cuestiones relacionadas con personas que pueden carecer de la capacidad mental para tomar decisiones. En el juicio, un psicólogo clínico presentó un informe diciendo que el hombre de 36 años, conocido como J.B., representa un «riesgo moderado» de ofensas sexuales para las mujeres , particularmente para aquellas que son vulnerables, según publica The Guardian .
Además, el psicólogo señaló que J.B. no puede entender que el consentimiento de una mujer es relevante en situaciones sexuales, ni que intentar tener relaciones sexuales sin consentimiento puede ser un delito penal .
Sin embargo, la jueza dijo que insistir en que J.B. comprenda la cuestión del consentimiento antes de que se le permita tener relaciones sexuales sería una discriminación porque «le impondría una carga que un individuo capacitado no puede compartir».
Derecho a cometer errores
Ella dijo que no tener ese conocimiento podría resultar en un proceso penal, pero J.B. tenía «derecho a cometer los mismos errores que todos los seres humanos pueden cometer, y cometen, en el transcurso de su vida».
J.B. nunca ha sido acusado de ningún delito, pero debido a su comportamiento hacia las mujeres ha estado sujeto a un plan de atención por parte de su autoridad local desde 2014 que ha impuesto limitaciones significativas a sus libertades.
La autoridad local quería que el plan de atención se mantuviera en su lugar, pero la jueza dijo que J.B. había «dejado muy claro que desea desesperadamente encontrar una novia con la que pueda desarrollar y mantener una relación. Está ansioso por tener una pareja sexual y cree que las restricciones actuales representan una interferencia injusta e injustificada en sus derechos básicos a una vida privada y familiar».
La sentencia dice que la «decisión de entablar relaciones sexuales es una expresión primordial de nuestra humanidad y existencia como seres sexuales. Es una parte esencial de nuestro ADN básico como seres humanos reproductores».
En su presentación ante el tribunal, la autoridad local dijo que había preocupación porque si no se controla el comportamiento de J.B. «podría resultar en su exposición al sistema de justicia penal y el riesgo para las mujeres potencialmente vulnerables». Por esto se espera que apele contra la decisión.
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