Irene Montero acusa a los medios de «criminalizar el 8-M»

El Gobierno intenta escenificar hoy su unidad con una declaración conjunta tras una semana de discrepancias entre los socios

La ministra de Igualdad, Irene Montero, en el primer acto feminista en el marco de las actividades del 8-M INSYITUTO DE LA MUJER

Beatriz L. Echazarreta

«Nos vemos en las calles» . Así se cerró ayer el acto en el Ministerio de Igualdad sobre las luchas feministas con motivo del 8-M y al que acudió la ministra del ramo, Irene Montero, que no terminó de concretar si acudirá o no a las marchas convocadas en Madrid por el Día Internacional de la Mujer. Montero, a una semana de los fastos del feminismo, c argó contra los «poderes mediáticos» de los que dijo «han orquestado una criminalización del 8 de marzo del año pasado» . Unas marchas en las que ella misma pudo contagiarse de Covid-19 junto a otras dirigentes del Gobierno de coalición.

Está previsto que hoy mismo el Gobierno escenifique una posición unánime en torno a la bandera de la igualdad que tanto las ha dividido, y lo hace a través de una declaración institucional previa al 8-M. No es casualidad que la ministra Montero se autocorrigiera ayer cada vez que pronunciaba la palabra «feminismo» y la cambiara por «feminismos» . Las ramificaciones del movimiento no se ponen de acuerdo en algo aparentemente tan sencillo como asistir o no a una manifestación en la era Covid.

La semana pasada, como adelantó este diario, Igualdad y la Comisión del 8-M hicieron pública su voluntad de volver a «tomar las calles» en el Día de la Mujer, haciendo caso omiso de la amenaza de una cuarta oleada de coronavirus en España si se relajan las medidas de contención. Si bien Sanidad se abstuvo entonces sobre la celebración en las calles de la efeméride y lo dejó todo en manos de las Delegaciones de Gobierno, el miércoles, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, fue tajante y desconsejó las marchas alegando que «por coherencia, no ha lugar. La situación epidemiológica no lo permitiría ».

La formación morada ha ido deslizando en los últimos días que apuesta por acudir a las marchas que tendrán lugar en cuatro puntos de la capital dentro de una semana. Pablo Echenique, portavoz parlamentario de Unidas Podemos, afirmó que los de Iglesias «irán a las marchas del 8-M que haga el feminismo» , pues Darias «sólo hace una recomendación».

Ambigüedad socialista

La posición de los socialistas es la que más incógnitas despierta por ambigua hasta el momento. Ayer mismo, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, defendió que los socialistas «estarán presentes el próximo 8 de marzo» , aunque con actos que respeten las indicaciones sanitarias y no conlleven ningún riesgo.

La postura de la Secretaría de Igualdad es aún más imprecisa, ya que evitan utilizar el término «presentes» y lo sustituyen por «apoyo a actividades que respeten las restricciones». El socialismo no quiere descolgarse de la celebración de este día al autoproclamarse como «pioneros en la lucha de los derechos de las mujeres» , pero se arriesgan a contradecir las indicaciones de su ministra de Sanidad.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación