Día Internacional de la Niña y la Ciencia
«En Europa se está dado la paradoja de la igualdad: a más igualdad, menos vocaciones tecnológicas»
Verónica Pascual, ingeniera aeronáutica, defiende que el talento no tiene género y se queja de que hacen falta más gestos: por ejemplo, «solo 17 mujeres han ganado el Nobel desde 1903, con Marie Curie»
Verónica Pascual , risa abierta y profunda. Esta ingeniera aeronáutica (nacida en Burgos, en 1979) es la presidenta de la Fundación Asti y CEO de Asti Mobile Robotics. Pascual conversa con ABC sobre la efeméride de hoy, el Día Internacional de la Niña y la Ciencia:
¿Qué es ASTI y en qué trabajan?
La Fundación nace de la toma de conciencia de las oportunidades y también de los importantes desafíos de la era de la transformación digital, sabiendo que muchos puestos de trabajo desaparecerán y otros nuevos serán generados y que la clave de esta transición sostenible está y estará en la educación de nuestros jóvenes y la formación en el empleo. Así, hace tres años constituimos con sede en Burgos la fundación ASTI Talent Tech con la misión de desarrollar el talento digital y fomentar las vocaciones STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) entre los más jóvenes. Esta misión la venimos desarrollando a través de tres programas:
STEM Talent Girl , el proyecto de referencia en España para el fomento del talento STEM en población femenina.
ASTI Challenge , el desafío educativo más importante en España en el campo de la robótica móvil que se celebra con carácter anual en las instalaciones del Museo de la Evolución Humana. La cuarta edición se celebrará el próximo 28 de marzo.
STEM Talent Kids , proyecto para la estimulación del talento desde edades tempranas.
La declaración por parte del Grupo ASTI es contundente, ahí donde estén las compañías del grupo suministrando proyectos de robótica móvil o de transformación industrial, debe estar la Fundación contribuyendo activamente en la sociedad para la generación de vocaciones STEM en los jóvenes.
Para usted, ¿qué significa ser niña y querer dedicarse a la Ciencia?
El talento no tiene género. Nacer niña o mujer no tienen otro significado que el puramente literal, el género en el momento del nacimiento. La progresión de la persona, su voluntad para desarrollarse, sus limitaciones o autolimitaciones en materia de talento, científico o no, no dependen o no deberían depender del género.
¿Por qué cree que es necesario todavía un Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, si es que todavía lo es?
Las cifras son contundentes. La mujer continúa estando muy poco representada en la ciencia . Solo 17 mujeres han ganado un Premio Nobel de Física, Química o Medicina desde Marie Curie en 1903, en comparación con los logrados por 572 hombres. En la actualidad, el 28% de los investigadores del mundo son mujeres y en España sólo el 25% de los alumnos que elige una carrera del ámbito STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). En el caso de las ingenierías, el porcentaje se reduce a menos del 12%.
Es evidente que ante estas estadísticas tenemos que seguir trabajando y dedicando esfuerzos para que las mujeres estén mejor representadas en el ámbito de la ciencia y que más mujeres opten por carreras STEM. Instituciones, gobiernos, partidos y sociedad en general han de luchar juntos para dar la vuelta a esta realidad, es cuestión de futuro, de crecimiento sostenible, de tener una posición de relevancia en el mundo. No podemos perder el 50% de la sociedad en uno de los ámbitos más importante para nuestro futuro. Es responsabilidad de todos.
Leímos hace muy poco un estudio por el que aún un 30% de los chavales quieren estudiar carreras que les abocarán al fracaso, o que serán robotizadas en el futuro y para la que no harán falta tantos seres humanos. ¿Qué opina usted al respecto?
Tenemos que ser capaces de despertar entre los jóvenes la inquietud por las carreras STEM. Y, por ello, es muy importante la orientación que se les proporciona a estos jóvenes en el entorno escolar. Es más que razonable pensar que no todos ellos han de elegir una carrera técnica, porque en ello influye la vocación personal de cada uno, pero lo cierto es que, como sociedad, tenemos la obligación de desarrollar en los jóvenes la vocación por carreras STEM, carreras de futuro, para las que el mercado laboral está demandando cada vez más posiciones y que hoy por hoy se quedan sin cubrir.
Al hilo de la pregunta anterior, ¿cómo ve usted el futuro de las mujeres que quieran estudiar STEM y aquellas que no quieran hacerlo?
Lo veo prometedor. Y creo, además, que todos los esfuerzos que se están realizando desde diferentes instancias van a dar sus frutos no demasiado tarde. Desde la Fundación ASTI, y más en particular desde el Programa STEM Talent Girl, trabajamos con toda humildad pero no por ello con menos perseverancia y rotundidad en que más alumnas se incorporen a carreras STEM.
¿Como hace STEM Talent Girl, por qué hay que azuzar el talento en las niñas para que se dediquen al STEM?
STEM Talent Girl es un programa de la Fundación ASTI en colaboración con más de 40 empresas y algunas administraciones, como la Junta de Castilla y León, cuyo objetivo es fomentar las vocaciones STEM entre las niñas. Actualmente, el proyecto se está desarrollando en Ávila, Burgos, Segovia, Salamanca, Palencia, León, Valladolid, Madrid, Asturias, Cantabria y La Rioja, aunque nuestro objetivo es extenderlo a otras regiones españolas y europeas en los próximos años. A través de STEM Talent Girl impulsamos iniciativas y actividades con las que buscamos inspirar, educar y empoderar a niñas, jóvenes y mujeres con el fin de que desarrollen su talento en el campo STEM.
No se trata tanto de azuzar como de convencer del valor y de la importancia de que todos nos pongamos a trabajar para que más mujeres opten por esta formación técnica, pero sobre todo para que la sociedad no desperdicie el 50% del talento que tiene a su disposición. Gobiernos, instituciones educativas y, por supuesto, los padres tienen que remar en una misma dirección para reducir la brecha de género que hoy existe en el campo de las STEM.
Ligada a la pregunta anterior, ¿cuánto de culpa tienen los padres de la nula «explotación» del talento de una mujer para ámbitos menos convencionales?
Debemos dejar de estar del lado del problema y pasar al lado de la solución, no se trata de buscar culpas, se trata de inspirar y facilitar soluciones. Como padres, es difícil que demos a conocer a nuestros hijos temáticas que probablemente nosotros mismos no conocemos, pero lo que sí podemos hacer es despertar la curiosidad en nuestros hijos y poner todas las facilidades en nuestra mano para que nuestros hijos conozcan nuevas oportunidades. Queramos o no, el futuro es tecnológico y la mejor herencia en vida para nuestros hijos es fomentar su formación en ámbitos que son y serán de futuro.
«Queramos o no, el futuro es tecnológico»
¿Y qué necesita España para estar al nivel de otros países en el fomento de las STEM femeninas?
El déficit de profesionales STEM es un fenómeno global que afecta a todos los países desarrollados y tanto a hombres como mujeres, si bien es más alarmante entre la población femenina. Nos encontramos en una situación pareja a los países de Europa central, pero a distancia de países de Europa del este como Polonia y muy lejos de los países a nivel internacional que más están trabajando este tema. En Europa se está produciendo lo que se conoce como paradoja de la igualdad. Son los países más desarrollados en materia de género como los países escandinavos los que presentan un porcentaje menor de vocaciones tecnológicas. Tenemos que avanzar en la mejora de los procesos de orientación académica y profesional para aumentar las vocaciones en ambos sexos y de manera específica modificar estereotipos y dar más visibilidad a mujeres STEM que sirvan de referentes a las nuevas generaciones.
«No soy partidaria de las cuotas, pero a veces hay que forzar el cambio para que éste se consolide»
¿Es usted partidaria de las cuotas?
El talento no tiene género, ni nacionalidad, ni raza. No soy partidaria de las cuotas, pero a veces hay que forzar el cambio para que éste se consolide . Soy partidaria de educar a nuestros jóvenes en igualdad de responsabilidad, exigencia, valores y capacidades.
Dígame algún gesto concreto que usted demandaría para apoyar su causa y su proyecto por parte de las autoridades. Por ejemplo, ¿un Ministerio de Ciencia que tuviera una mujer y no un hombre?
Evidentemente, como bien dice usted, se trata de gestos, y los gestos, como las formas, son muy importantes. Pero lo realmente importante es que haya políticas públicas que contribuyan a conseguir que las niñas y jóvenes accedan a carreras STEM, al igual que lo hacen los niños y jóvenes. Pero, no solo políticas públicas, sino también programas de orientación sobre el terreno, que demuestre a las jóvenes el talento que tienen en estas áreas y las múltiples posibilidades que se les abren en su futura carrera profesional. Y aquí tampoco podemos olvidar el valor de tener referencias, ejemplos a seguir. Esto desde la Fundación ASTI lo tenemos absolutamente claro.
¿Cree que las Matemáticas, las ingenierías se resisten a las mujeres, o las mujeres nos resistimos a lanzarnos a por ellas, cuál es la principal traba que existe para el amor entre una mujer y una disciplina técnico-científica?
La traba cultural es un hecho . Sería absurdo negarlo. Nos han educado para asumir que las mujeres son mejores o tienen habilidades más consolidadas para las humanidades o las ciencias sociales, mientras que los hombres están más preparados para afrontar una formación técnica. Pero esto no es así, es evidente. Debemos trabajar para que las niñas y jóvenes desarrollen el talento STEM y que la brecha de talento que hoy existe desaparezca.
El robot del futuro, ¿qué porcentaje tendrá de roles femeninos y de roles masculinos, cuánto será de mujer y hombre?
Al igual que siempre he dicho que son los equipos mixtos, con presencia diversa de género pero no sólo de género, los que generan mayor aportación de valor en las compañías de base tecnológica y las que tienen ideas más innovadoras, creo que el robot del futuro tendrá roles femeninos y masculinos prácticamente a partes iguales, integrados de manera efectiva. Esto significa que el robot del futuro tendrá las mejores capacidades y habilidades de ambos.