Indignación en Italia por una receta francesa de la salsa carbonara

Un video publicado en Francia sobre uno de los platos más famosos de Italia se convierte en viral. Los italianos responden con disgusto a los galos por el desaguisado: «Perdonadlos, no saben lo que hacen»

Salsa carbonara VÍDEO: YOUTUBE

ÁNGEL GÓMEZ FUENTES

Una versión culinaria francesa de espaguetis a la carbonara -uno de los platos más famosos de Italia, original de la región del Lazio y en particular de Roma- crea indignación a los italianos. Los apasionados a la buena cocina han visto, como si se tratara de un film de horror, el video publicado por la web francesa Demotivateur: En una olla se colocaban cebolla, panceta, farfulle (pasta en forma de mariposa) y un vaso de agua; tras hervirlo durante 15 minutos, se añadía nata líquida, queso parmesano, pimienta negra, perejil y una yema de huevo cruda. Todo un desastre, que destruyó un plato símbolo de la tradición culinaria italiana. Nada tenia que ver con la auténtica carbonara: los italianos habitualmente usan espaguetis -aunque para este plato se presta también otros tipos de pasta larga o incluso corta como penne y rigatoni- panceta o guanciale (careta de cerdo), huevo, pecorino romano (queso de oveja), aceite, sal y pimienta. Y, por supuesto, la pasta debe quedar al dente. Siempre. Para colmo, en el video francés aparecía en primer plano un paquete de pasta Barilla, como si la marca de pasta famosa en todo el mundo patrocinara o promocionara el invento de la nueva carbonara.

Indignación

Inevitable ha sido la ola de indignación por una polémica bautizada en los medios como «carbonaragate»: el video se convertía en viral en Italia y Francia, mientras el debate culinario se ha alargado en las redes sociales. El «Corriere della Sera”, primer periódico italaliano, reproducía el video bajo este titular: “En la muerte de la carbonara: La desastrosa video receta francesa”. El mismo mensaje, apelando además al perdón por la ignorancia francesa, se da en Facebook, en la página Sai Cosa Mangi? (¿Sabes lo que comes?): «Cinco minutos de silencio por la muerte de la carbonara en Francia. Por favor, perdónalos porque no saben lo que están haciendo».

Ante la tremenda repercusión que ha adquirido el caso, con un mar de críticas, Barilla ha tenido que tomar distancias con este mensaje: ¡Mon dieu! Estamos abiertos a todas las interpretaciones creativas de la mítica carbonara, pero esta va mucho más lejos… Désolé!”, ha escrito la empresa de pasta italiana. Y para intentar aplacar la ira de la web, Barilla presionó con el fin de Demotivateur retirara el video.

La polémica ha degenerado también en un cierto enfrentamiento cultural gastronómico franco-italiano. “Radio France Info” se pregunta maliciosamente si los italianos no son demasiado susceptibles en relación con su cocina, mientras otros medios se inclinan con los puristas de la carbonara, piden excusas a los italianos y abundan en la idea evangélica del perdón: “Los franceses no saben lo que hacen, perdonadlos”. El diario “Le parisien” es uno de los que más cargan las tintas: “Una carbonara a la francesa produce náusea a los italianos”.

Señal de identidad y orgullo

Aunque pueda parecer extraño, la polémica y enfrentamiento que se ha suscitado por un plato típico, tiene su justificación: La cocina es reflejo de una identidad y a menudo sirve también de orgullo para un pueblo o una región. En esta ocasión, la polémica por la carbonara ha traspasado las fronteras, por el desaguisado que han hecho en Francia, pero hay que resaltar que también dentro de Italia a veces ha surgido la polémica sobre la mejor receta de la carbonara: ¿Panceta o guanciale? ¿Queso pecorino o parmesano? ¿Se puede utilizar la crema o nata líquida? Al fin y al cabo, la carbonara es un plato reciente: Su origen es misterioso y circulan varias hipótesis sobre la creación de este gustoso plato, que solo aparecen en los libros de recetas tras la II Guerra Mundial. En fin, como en España ocurre con la paella, también en Italia existen diversas variantes de la carbonara, algunas radicales: Una de ellas es “carbonara vegetariana”, que prevé la sustitución de la panceta o guanciale con calabacín. Existe también la “carbonara marinara”, que sustituye la panceta con marisco o pescado.

Libertad ante el fogón

En definitiva, hoy la opinión más generalizada de los italianos ante esta polémica es que cada cual es muy libre de colocarse frente a los fogones para cocinar un plato como le dé la gana, pero hay que llamar a las cosas por su nombre. Lo que han hecho en la web francesa Demotivateur no se puede llamar carbonara, que tiene unos secretos para lograr una perfecta receta: Cortar en tocitos la panceta o guanciale.

Freírlo en sartén sin otro condimento.

En una tarrina se bate el huevo.

Se añade el queso pecorino rayado.

Se ajusta de sal y se sazona con pimienta.

Cocer la pasta al dente y echarla en la sartén que contiene la panceta o guanciale.

Retirarla del fuego y echarle el huevo mezclando rápidamente, añadiendo si es necesario un poco de agua con la que se coció la pasta.

Así, la carbonara resultará un plato gustosísimo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación