Un guardia forestal, detenido en Portugal por pirómano
El joven, de 25 años y casado, participó después en el combate a las llamas
Un guardia forestal ha sido detenido por la Policía portuguesa a causa de las fundadas sospechas de que provocó un grave incendio el pasado 17 de julio en Oleiros, en el distrito de Castelo Branco (centro-norte del país).
Se trata de un joven de 25 años, casado y que fue identificado «por la presumible práctica de un delito de incendio forestal en un terreno poblado con arbustos, pinos y eucaliptos», de acuerdo con el documento oficial alusivo que emitió el cuerpo de seguridad luso
Las llamas se iniciaron en el enclave de Mosteiro y alcanzaron 291 hectáreas, además de desatar el pánico en los alrededores . Con todo, lo más sorprendente llegó después, cuando se analizaron los pormenores de los hechos hasta desembocar en una conclusión que dejó atónitos a los agentes: «El sospechoso prendió fuego sirviéndose de un artilugio incendiario, siendo una de sus motivaciones participar en el combate de las llamas».
El siniestro se originó hacia las 15.50 horas del lunes 17 de julio y, en pocas horas, ya se había extendido por el territorio colindante, donde alcanzó una dimensión considerable e hizo que numerosos vecinos se decidiesen a abandonar sus casas víctimas del miedo.
La Policía tiene previsto someter próximamente a un interrogatorio al individuo en cuestión, pues ha sido citado por el procedimiento de urgencia instaurado recientemente al otro lado de la frontera.
Justo 24 horas antes, había sido detenida una mujer de 50 años como presunta autora del fuego ocasionado el pasado domingo, día 23 de julio, en el municipio de Santo André das Tojeiras, igualmente ubicado en la zona de Castelo Branco.
Se trata de una de las franjas geográficas más castigadas por la acción de las llamas en lo que va de verano en el país vecino, que sufre un mal endémico al cual asiste impotente y con escasos medios de combate.
En este 2017 ya han pasado a disposición judicial 42 personas por avivar incendios. Una prueba más de que parte de estos siniestros responde a la provocación de la mano del hombre, unas veces para lograr la recalificación de los terrenos en suelo apto para la construcción y otras debido a los impulsos de auténticos pirómanos.
De hecho, los responsables de la Asociación de Bomberos ya han apuntado a la existencia de varias mafias donde actúan mercenarios que cobran por encender la mecha y son pagados por los dueños de terrenos adyacentes.
La aldea de Falagueira, en el distrito de Portalegre , vivió este jueves 27 de julio su s egunda evacuación preventiva en 24 horas, pues el fuego que parecía controlado se reactivó de forma inesperada.
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