«Fire challenge»: el reto viral que ha dejado a un niño herido grave por quemaduras de segundo grado

El pequeño de 12 años tuvo que ser ingresado en el hospital tras realizar el «reto del fuego» junto a un amigo en Michigan (Estados Unidos)

El cuerpo del niño sufrió varias quemaduras por las que tuvo que ser atendido NBC News

ABC

Es indudable que Internet ha cambiado el mundo, especialmente la manera de comunicarse. Pero un mal uso de esta plataforma puede traer consecuencias muy negativas, incluso trágicas. Debido a la capacidad de estas «carreteras» digitales para propagar algún contenido, han surgido los llamados «retos virales» , que en su mayoría implican una alta peligrosidad.

El último caso en conocerse es el de un niño de Michigan que ha resultado herido grave por ser partícipe del llamado «fire challenge»; o lo que es lo mismo: «reto del fuego». El pequeño, de 12 años, hizo este dañino reto consistente en prenderse fuego en alguna parte del cuerpo. Sin embargo, las llamas se apoderaron rápidamente de su cuerpo, sufriendo quemaduras de segundo grado y teniendo que ser llevado e ingresado de urgencia en el hospital.

El niño cuenta que la primera vez se produjo un pequeño fuego, pero en la segunda las llamas se esparcieron y tuvo mucho dolor en su espalda mientras se le producían serias quemaduras. También ha querido hablar ante las cámaras de «NBC News» su madre, Tabitha Cleary, para que la sociedad tome conciencia de la peligrosidad de este reto. « Que nadie intente hacer estos retos , no vale la pena arriesgar su vida con esto. Mi hijo tiene quemaduras de segundo grado, pero podría haber sido peor », cuenta con lágrimas en sus ojos.

Este reto que ha vuelto a la palestra mediática no es inédito. Ya en 2010 fue la Universidad de Iowa (EE.UU.) la que alertó del aumento de jóvenes que lo llevaban a cabo. En 2014, hubo un repunte fuerte y varios medios locales indicaban que diversos adolescentes estadounidenses habían sido llevados a centros médicos con quemaduras por practicar este tipo de reto.

Pero sorprende la juventud con la que se inicia irreponsable práctica. El pasado año, se reportaba que otra niña de 12 años tuvo que estar ingresada durante dos meses en Detroit debido a la gravedad de sus quemaduras por prender rociar alcohol y prender fuego en su cuerpo.

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