César Nombela

Emprendimiento

Muchos profesores y doctorados admiten plantearse el promover una empresa. Pero son pocos los que lo llevan cabo

César Nombela Cano

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La creación de conocimiento es la base principal de la innovación que hace más competitivas a las sociedades en el mundo actual. La revista «Nature» recoge una serie de ejemplos de emprendimiento desde la universidad. Son muchos los territorios del conocimiento que registran avances notables , hasta espectaculares, pero igualmente son muchos los problemas que resolver desde una perspectiva científico-técnica. Las oportunidades para la innovación se presentan con profusión en numerosos campos.

El de la salud sin duda es el de mayor demanda, porque es ilimitada la aspiración de vivir más y mejor aprovechando los avances en Biomedicina . Pero también los campos de nuevos materiales, la energía y medio ambiente o la tecnología digital se revelan como territorios en los que seguir constatando que el mundo está por inventar. En los países más desarrollados, muchos profesores y doctorados admiten plantearse el promover una empresa. Pero son pocos los que lo llevan cabo, entre otras cosas por las dificultades de generar varias docenas de millones euros en financiación.

En España se utiliza la palabra emprender con profusión , incluso se programan cursos de todo tipo para emprendedores , pero la realidad pone de manifiesto limitaciones importantes, que deberíamos aspirar a corregir. Casi todas ellas tienen que ver con las propias limitaciones de la gestión y organización de nuestras universidades cuyo nivel académico y científico-técnico podría ser mucho mejor, sustituyendo el sistema de gobierno autogestionario por otro de rendición de cuentas y resultados.

La financiación privada de la investigación universitaria, que apenas suponía un 24% en 2008, sufrió un descenso acumulado en 2008-2014 de hasta el 47%. Es demasiado reducida la implicación de la empresa en la I+D en España, pero también nuestro sistema científico, cuya producción básica y cuyo impacto crecieron incluso en los años de crisis, debería plantearse acceder al mercado internacional. En esto hay una gran heterogeneidad entre universidades a la hora de captar recursos privados en el ámbito internacional. Estimo que nuestro recorrido hacia mejores posiciones en transferencia de conocimiento y en emprendimiento es posible, pero reclama políticas adecuadas.

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