Los donativos online a las parroquias se han multiplicado por diez durante la crisis sanitaria

El gerente de la Conferencia Episcopal Española apela a la generosidad de los españoles para «repartir mucho entre los que más lo necesitan»

Sacerdotes reparten alimentos en la parroquia de Pola de Siero (Asturias) ABC

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Como consecuencia de la crisis sanitaria, las parroquias se han convertido en el único recurso disponible para muchas familias que tienen dificultades para llenar la cesta de la compra . Sin embargo, la ausencia de la misa dominical durante más de dos meses ha supuesto un duro varapalo para la economía de muchas iglesias que utilizan sus colectas para financiar gran parte de su labor caritativa.

Desde que comenzó el estado de alarma el pasado 14 de marzo, las parroquias han dejado de ingresar cerca de 38,4 millones de euros procedentes de las colectas ordinarias, una media de 20 millones de euros mensuales, según las estimaciones de la Conferencia Episcopal Española.

Ante la imposibilidad de acudir a misa, muchos católicos han decidido recurrir a los donativos online. En los últimos sesenta días, los fondos recibidos por el portal www.yodonoamiiglesia.es se han multiplicado por más de diez. Han pasado de los 80.000 euros mensuales de media antes de la epidemia a más de 1,1 millones de euros en lo que llevamos del mes de mayo.

«Los católicos se están movilizando y es evidente que necesitamos el esfuerzo de todos. En momentos complicados, la Iglesia quiere estar con todos pero sobre todo con los más necesitados», aseguró este lunes el vicesecretario para Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española, Fernando Giménez Barriocanal, con motivo de la presentación telématica de la parte económica de la Memoria de actividades de la Iglesia de 2018. Pese al enorme esfuerzo realizado, el volumen de donativos realizados a través de este portal sigue estando «muy lejos de las colectas que se realizan en las iglesias". «Esperamos poder seguir acortando esa diferencia para que la Iglesia pueda seguir haciendo todo el bien que se necesita», insistió.

Iniciativa pionera

La web -- www.donoamiiglesia.es --, es una iniciativa pionera puesta en marcha por la propia Conferencia Episcopal en el año 2016 para facilitar las donaciones «periódicas o puntuales» de los particulares a cualquiera de las 23.000 parroquias que hay en España. «No debemos olvidar que la principal fuente de financiación de la Iglesia son las aportaciones de los fieles", subrayó Giménez Barriocanal.

El llamamiento a la solidaridad del responsable de las finanzas de la Iglesia cobra especial relevancia en momentos en que la demanda de ayuda a Cáritas a través de las parroquias se ha multiplicado por tres desde el inicio del estado de alarma . «Parece extraño hablar de cuentas y de dinero en estas circunstancias pero la Iglesia está en salida dando lo que ha recibido. La Iglesia no es una empresa ni un negocio. Lo que tiene lo da y por eso apelo a la generosidad de todos los fieles porque la necesidad se está multiplicando», subrayó el gerente de la Conferencia Episcopal.

En los últimos años, la Iglesia ha recibido un importante espaldarazo de los contribuyentes que marcan su casilla en la declaración de la Renta. La pasada primavera esta institución volvió a pasar con nota la «prueba» de la asignación tributaria. Según el balance definitivo presentado este lunes por la Conferencia Episcopal, los fondos asignados a la Iglesia alcanzaron una cifra récord de 285,1 millones de euros, 700.000 euros más de lo que figuraba en la liquidación provisional del Ministerio de Hacieda presentada en febrero de este año por la CEE. Esto quiere decir que uno de cada tres contribuyentes marcaron la «x» en su casilla, 27.000 nuevos declarantes más que un año antes.

Aunque la cifra es importante, estos recursos que los contribuyentes asignan a la Iglesia a través del IRPF suponen solo el 23% de la financiación total de las diócesis. Los fieles, con sus aportaciones y donaciones voluntarias, llevan el peso más grande (34%). Pese a esta realidad, «las diócesis rurales y más pequeñas siguen siendo las que más dependen» de la «x», indicó Giménez Barriocanal. Es el caso de Guadix, Ciudad Rodrigo o Segovia en las que estos fondos pueden llegar a suponer hasta el 51,5 por ciento de sus recursos. En diócesis grandes como Madrid o Barcelona, por ejemplo, representa apenas el 17,4 por ciento.

Pese a los buenos resultados, el gerente de la CEE admitió este lunes que «la crisis económica que trae consigo esta epidemia también tocará a la asignación tributaria de los próximos años». «Vendrán años de recortes importantes según cómo evolucione la economía, pero si conseguimos mantener el número de contribuyentes (8,5 millones) o incrementarlos tendremos más recursos para repartir mucho entre los que más lo necesiten», apuntó el gerente de la CEE, quien recordó que marcar la «x» no supone pagar más impuestos o que le devuelvan menos.

Una y otra vez el responsable de las finanzas de la Iglesia insistió en que «las condiciones en las que van a vivir muchas familias dependerá de la generosidad de todos los españoles» y por ello apeló a un compromiso «personal, estable y permanente» de cada católico. «Es más necesario que nunca de que todos nos demos cuenta de que la Iglesia no vive del aire, que el mantenimiento de la estructura depende la aportación de los fieles», insistió.

Herramientas de financiación

El 80 por ciento de los fondos que la Conferencia Episcopal recibe por vía de la asignación tributaria –202 millones de euros– son repartidos a las diócesis que los utilizan en su mayor parte (51%) para la conservación del patrimonio y sus actividades asistenciales y caritativas. El 20% restante de los recursos, la CEE los destina a pagar la seguridad social del clero, el sostenimiento de centros de formación, Cáritas, la construcción de templos y su propia campaña de comunicación y transparencia.

Sobre la salud financiera de las diócesis, Giménez Barriocanal admitió este lunes que en general «todas están correctamente financiadas», pese a que «algunas (sin dar nombres) tienen más dificultades económicas que otras». «Todas están en una situación de austeridad pero con una economía razonable. Sin embargo, con esta crisis sanitaria estimamos que la merma de recursos será bastante importante», indicó.

La situación no es nueva para ninguna de ellas. La crisis económica que comenzó en 2008 ya supuso para muchas de ellas un fuerte endeudamiento. En 2010, uno de los peores años de la recesión, la necesidad de financiación llegó hasta los 24,8 millones de euros. Ante la posibilidad de que esas circunstancias vuelvan a producirse, Giménez Barriocanal explicó que la Conferencia Episcopal «está mirando todas las herramientas posibles de financiación, entre ellas, los créditos».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación