Cómo saber si un pescado es fresco o no
No te dejes engañar: estas son las claves para diferenciar un pescado realmente fresco
La frescura de un pescado depende del tiempo transcurrido desde su captura hasta el momento en que lo consumimos
Estos son los consejos que debes seguir para identificar un pescado capturado de forma sostenible
El pescado es parte vital de cualquier dieta omnívora que se precie. No solo es un alimento con mucho sabor, sino que su ingesta además aporta muchísimos beneficios a nuestro cuerpo: grasas saludables como Omega-3, protección corazón y al sistema circulatorio o vitaminas y minerales imprescindibles para tener una buena salud.
Este alimento también puede ser el complemento perfecto para una dieta baja en grasas y alta en proteínas gracias a su alto valor proteico y a la facilidad que tiene para digerirse, al contario que algunas carnes. Es por ello que los nutricionistas aconsejan tomar entre 1 y 4 raciones de pescado o marisco a la semana .
Sin embargo, a la hora de comprarlo, la frescura del pescado en muchas ocasiones puede ser un problema a la hora de consumirlo, ya que es fácil que se eche a perder rápidamente . Y es que, en muchos locales, es habitual que nos vendan como fresco un alimento que, realmente, no lo es. De ello depende directamente el tiempo transcurrido desde su captura hasta que nosotros lo consumimos.
Es por ello que, para diferenciar realmente un pescado fresco de uno que no lo es y que no nos timen por algo que estamos un pagando a un alto precio, es necesario tener en cuenta una serie de claves.
[Descubre los consejos para identificar el pescado capturado de forma sostenible]
Claves para reconocer si un pescado es fresco
Así, a simple vista, estas son las claves para conocer si un pescado es fresco o no lo es :
- Uno de los indicativos clave para saber si un pescado es fresco proviene del estado de sus ojos . Estos deben ser convexos con la córnea cristalina y las pupilas negras o azuladas. En caso de que estas sean amarillentas, hayan perdido el color o se hayan hundido hacia dentro, es muy probable que se trate de un pescado que hace tiempo que fue capturado.
- Las escamas también pueden aportar datos sobre la frescura del pez en cuestión: deben estar intactas y húmedas, pues aquellos pescados que comienzan a perderlas podrían haber empezado a descomponerse.
- Su piel debe ser brillante , casi metálica, y de un color vivo, siempre con una textura algo resbaladiza, pero bien adherida a la carne.
- El mal olor que desprenda una pieza de pescado también es síntoma de haber sido capturado hace tiempo. Es por ello que, si desprende un olor acusado, similar al del amoniaco, es posible que esté en mal estado.
- Los filetes de pescados también deben ser consistentes y firmes , además de lisas y húmedas. En caso de que estas estén secas o luzcan amarillentas, podría tratarse de un pescado no fresco.
- La espina central da claves sobre la frescura de la pieza. En este caso, debe ser prácticamente incolora y está previsto que supure un fluido rosado que, cuando más rojo sea, más fresco será también el pescado. Sin embargo, si este líquido pierde el color o se tiñe de marrón, podría rozar el mal estado.
- La cavidad abdominal (la zona cercana a la tripa del pez) deberá estar plagada de manchas de sangre. Además, las branquias de esta zona serán rosadas y estarán húmedas.
Sin embargo, también tienes que tener en cuenta que la compra del pescado fresco no impide que este pueda ir deteriorándose con el paso del tiempo. A la hora de consumirlo, debes saber que el pescado se estropea fácilmente y que, cuanto menos tiempo pase desde que su compra hasta que lo comes, mucho mejor.
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